Negro, ¨¢rabe, blanco

El lugar es simb¨®lico. El domingo pasado, Dreux dej¨® ser uno de los feudos del caudillo ultraderechista y las urnas colocaron en cabeza a Jacques Chirac, que sac¨® el 23% de los votos frente al 18% del presidente de Frente Nacional, victorioso en las presidenciales de 1995. Esta ciudad del valle del Sena, 80 kil¨®metros al oeste de Par¨ªs, cuenta con 32.000 habitantes y es un verdadero compendio de la f¨®rmula black-blanc-beur (negro-blanco-¨¢rabe). Le Pen les se?ala con el dedo: 'Dreux est¨¢ siendo abandonada por los franceses; se est¨¢ convirtiendo en una ciudad extranjera'.

El equipo de campa?a de Chirac quiso sacar partido de la situaci¨®n. El presidente-candidato visit¨® un centro deportivo en uno de los barrios empobrecidos, fuera de la ciudad antigua, y se reuni¨® con un centenar de concejales, profesores, estudiantes, animadores sociales, peque?os empresarios y amas de casa. A los temas de siempre -inseguridad, rebaja de impuestos, suavizaci¨®n de las 35 horas- a?adi¨® los aspectos positivos de los 'barrios sensibles', ocultos, seg¨²n ¨¦l, por la violencia.

'La acci¨®n de su alcalde y del consejo municipal aporta una demostraci¨®n de que cuando se ejecuta una acci¨®n firme, el extremismo retrocede', insisti¨® Chirac. El alcalde es de Uni¨®n por la Rep¨²blica (RPR), el partido chiraquista, que obtuvo al cargo respaldado por un 'frente republicano' montado frente al extremismo.