Las nuevas tribulaciones de Duhalde

Argentina roz¨® otra vez esta semana el fondo del colapso financiero. La salida de dep¨®sitos, que ni siquiera el corralito pudo frenar, se vino acentuando en el ¨²ltimo mes porque la justicia aceptaba los recursos de amparo de los ahorradores para llevarse su dinero. El Gobierno del peronista Eduardo Duhalde se vio ante un nuevo dilema: buscar una paridad fija con el d¨®lar.

Duhalde zanj¨® su primera crisis de Gobierno con un acuerdo de 14 puntos con los gobernadores provinciales

Si el Gobierno de Duhalde permit¨ªa el drenaje de capitales corr¨ªa el riesgo de que la mayor¨ªa de los bancos, entre ellos estatales, nacionales y extranjeros, se cayera y de que los ahorradores compraran d¨®lares con los pesos obtenidos, lo que incrementar¨ªa la devaluaci¨®n del 71% de la moneda y recalentar¨ªa la inflaci¨®n del 9,7% en el primer trimestre del a?o. Si cerraba el goteo del corralito, pod¨ªan crecer las protestas de una poblaci¨®n indignada por la violaci¨®n del derecho a su propiedad y, a su vez, enfriar¨ªa a¨²n m¨¢s una econom¨ªa que lleva cuatro a?os de recesi¨®n.

Unos 200.000 de los nueve millones de ahorradores iniciaron acciones judiciales y hasta la tercera semana de abril 21.568 hab¨ªan conseguido recuperar algo o todo su dinero. En total se llevaron del sistema financiero 707 millones de d¨®lares (804 millones de euros). Un documento de la patronal bancaria, en la que est¨¢n representadas las filiales de BBVA (Franc¨¦s) y SCH (R¨ªo), dirigido a la Corte Suprema de Justicia alert¨® de que si falla a favor de todos los recursos de amparo, los bancos deber¨ªan devolver 7.608 millones de d¨®lares (8.645 millones de euros), el doble del efectivo con que cuenta el sistema financiero. El informe advert¨ªa que la circulaci¨®n monetaria aumentar¨ªa el 142%, con el consiguiente impulso a la inflaci¨®n, y conllevar¨ªa cierres masivos de bancos. Hace diez d¨ªas fue suspendido por un mes el Scotiabank Quilmes, filial del canadiense Bank of Nova Scotia. Para evitar una sangr¨ªa mayor, el Banco Central argentino decidi¨® imponer el cierre de los bancos entre el lunes y jueves de esta semana, mientras en el Congreso buscaba alguna soluci¨®n.

La renuncia de Remes

Jorge Remes Lenicov, ministro de Econom¨ªa hasta el viernes pasado (el economista y embajador ante la UE y la OMC, el peronista Roberto Lavagna, ocupa ya su cartera) impuls¨® un proyecto de ley para frenar el colapso bancario mediante la conversi¨®n de los dep¨®sitos a plazo congelados hasta 2005 en t¨ªtulos a diez a?os de un Estado en suspensi¨®n de pagos externos. Una idea similar hab¨ªa aplicado en 1990 el Gobierno de Carlos Menem (1989-1999), pero los ahorradores del siglo XXI no son iguales que en aquel tiempo: adem¨¢s de m¨¢s numerosos, han demostrado su furia con manifestaciones cotidianas a las oficinas bancarias, que debieron reemplazar los vidrios de sus escaparates por chapas de acero, y se congregaron durante toda esta semana frente al Congreso para evitar la sanci¨®n de la llamada ley bono.

Lo consiguieron. Remes Lenicov renunci¨® el martes y hasta el propio Duhalde, elegido en enero por el Parlamento, tambale¨®. Sin embargo, los legisladores terminaron aprobando dos d¨ªas despu¨¦s la norma tap¨®n, que impide a quienes hayan obtenido un fallo favorable de primera instancia contra el corralito hacerse inmediatamente de los fondos, tal como ocurri¨® en las ¨²ltimas semanas. Deber¨¢n esperar la sentencia final de su caso.

Duhalde zanj¨® su primera crisis de gobierno con un acuerdo de 14 puntos con los gobernadores provinciales que responde a las exigencias del Fondo Monetario Internacional (FMI) para reanudar la ayuda interrumpida en diciembre pasado. El pacto no s¨®lo incluye el en¨¦simo compromiso de recortar el d¨¦ficit p¨²blico provincial, sino que tambi¨¦n se propone sin fecha la eliminaci¨®n del corralito. El objetivo consiste en descongelar primero las cuentas de ahorro. El Estado se har¨¢ cargo, en principio, de responder por los bancos p¨²blicos. El Banco Central se responsabilizar¨¢ por hasta 30.000 pesos (9.852 euros) de cada dep¨®sito en entidades privadas, que deber¨¢n responder por sumas superiores.

El FMI considera que el Gobierno argentino debe descongelar los ahorros en forma gradual, pero sin demoras, porque si no jam¨¢s se recuperar¨¢ el cr¨¦dito ni lo que queda del sistema financiero. Para ello le encomienda tres tareas fundamentales, seg¨²n un informe de M&S Consultores. La primera consiste en la creaci¨®n de condiciones que permitan la desaparici¨®n del corralito sin generar mayores presiones en la inflaci¨®n y el tipo de cambio. Para ello, el organismo de Washington propone la creaci¨®n de activos de ahorro que absorban la liquidez excesiva. S¨®lo despu¨¦s se podr¨¢ abrir de a poco el cerrojo bancario. Como opci¨®n al canje de dep¨®sitos a plazo por t¨ªtulos p¨²blicos, el FMI propone que los bancos ofrezcan a los clientes bonos propios negociables en el mercado secundario.

La segunda tarea radica en la reestructuraci¨®n y fortalecimiento de los bancos p¨²blicos, principalmente el Naci¨®n Argentina, el Ciudad de Buenos Aires y el Provincia de Buenos Aires. La ¨²ltima recomendaci¨®n del FMI apunta a establecer un marco que permita detener o amortiguar el deterioro del sistema financiero. En un pron¨®stico pesimista, el FMI calcula que el 30% de la cartera de pr¨¦stamos de los bancos privados y la mitad de la de las entidades p¨²blicas ser¨¢n irrecuperables este a?o. Si el drenaje de dep¨®sitos continuara, el capital del sistema se reducir¨ªa el 80% en 2002. Por el momento, la banca extranjera ya ha descontado fuertes p¨¦rdidas por la crisis: Citigroup, 2.200 millones de d¨®lares; BBVA y SCH, un total de 3.200 millones; FleetBoston 1.300 millones; HSBC (que esta semana anunci¨® que no pondr¨¢ ni un duro m¨¢s en Argentina), 1.100 millones; JP Morgan, 411 millones, y Bank of Nova Scotia (que cerr¨® su filial hace diez d¨ªas, pero intenta reabrirla), 377 millones.

La propuesta del FMI

El organismo presidido por Horst K?hler propone la creaci¨®n de una Unidad de Reestructuraci¨®n de la Banca Argentina (URBA), dentro del Banco Central, para desarrollar y aplicar soluciones para bancos identificados como d¨¦biles. La propuesta consiste en que el sector privado solucione sus problemas. Para ello, la URBA debe exigir a los accionistas de las entidades que inyecten capital fresco o vendan acciones por una tercera parte en 60 d¨ªas, adopten medidas urgentes para restaurar la liquidez en un mes y presenten un plan de negocios viable en 45 d¨ªas. Si los due?os no pueden o no quieren capitalizar sus bancos, o su plan resulta insostenible, la URBA deber¨ªa intervenir las entidades y buscarles un comprador. En caso de no hallarlo, la unidad reguladora transferir¨¢ activos y pasivos (excepto dep¨®sitos a la vista) a un fideicomiso manejado por instituciones privadas y entregar¨¢ los dep¨®sitos a la vista a una banco sano. El Estado deber¨ªa cargar con el coste de la reestructuraci¨®n de un sistema financiero que se encamina hacia una mayor concentraci¨®n. Los analistas vaticinan que BBVA y SCH, a diferencia de otros bancos extranjeros, permanecer¨¢n en Argentina para evitar la desconfianza de sus clientes en el resto de la regi¨®n y aumentar¨¢n en forma significativa su porci¨®n de mercado. En el camino deber¨¢ enfrentar la competencia de los bancos norteamericanos, en especial, del Citigroup.