El Ararteko reclama una norma que regule la seguridad de los espacios deportivos escolares

Algunos menores de la comunidad aut¨®noma han sufrido en los ¨²ltimos a?os diversos accidentes con las canastas y las porter¨ªas de futbito de los centros escolares y de otros espacios deportivos debido a la falta de fijaci¨®n al suelo o a las paredes de este tipo de equipamientos. En Euskadi no existe actualmente una normativa que establezca las condiciones de seguridad que deben reunir, por lo que su control dependa de cada ayuntamiento. Ante este situaci¨®n, el Ararteko ha reclamado al Gobierno una norma que regule los requisitos de seguridad de este material.

Los percances se suelen producir con m¨¢s frecuencia en horario lectivo, durante las clases de educaci¨®n f¨ªsica o cuando los menores juegan dentro de las instalaciones deportivas. Normalmente, el equipamiento suele cumplir las normas de homologaci¨®n que establecen las legislaciones comunitaria y espa?ola, pero es 'evidente' que los accidentes producidos demuestran la necesidad de medidas adicionales para que la utilizaci¨®n de estos elementos sea siempre segura. As¨ª lo refleja el Ararteko en el estudio que ha realizado analizando esta cuesti¨®n en el Pa¨ªs Vasco.

La utilizaci¨®n inadecuada de las porter¨ªas de futbito y de las canastas de baloncesto suele ser la causa que provoca los accidentes. Los escolares, cuando juegan, suelen colgarse de estos equipamientos. Como la mayor¨ªa de las veces no est¨¢n firmemente anclados al suelo, se vencen a consecuencia del impulso o del propio peso del menor, cay¨¦ndoles encima.

En varias ocasiones, los accidentes ha terminado con la muerte del menor. Es el caso del accidente ocurrido en la localidad navarra de Uhuarte Arakil en 1993, donde el fallecimiento de un ni?o llev¨® al Gobierno foral a regular por decreto las medidas de seguridad que deben incorporar las canastas y las porter¨ªas. Se trata de la ¨²nica norma que existe a nivel estatal y, seg¨²n el Ararteko, puede servir de referente a la hora de que Euskadi dicte su norma.

Anclaje al suelo

Una primera respuesta a los accidentes ha sido la de anclar las porter¨ªas y canastas al suelo. Sin embargo, el uso de una misma cancha para varios deportes ha revelado que esta soluci¨®n no es la adecuada siempre. El objetivo de que la pista tenga un car¨¢cter polideportivo y, por lo tanto, sirva para para practicar desde baloncesto hasta gimnasia, obliga a desplazar de un lugar a otro las canastas y porter¨ªas. Adem¨¢s, el Ararteko se?ala que el emplazamiento provisional de este material en un rinc¨®n de las instalaciones mientras se realiza otro deporte en la cancha debe cumplir tambi¨¦n unas m¨ªnimas medidas de seguridad. 'All¨ª donde se coloquen ser¨¢n elementos que servir¨¢n e inspirar¨¢n el juego de los menores', alerta el estudio.

La Ley de Deporte, aprobada por el Parlamento vasco en 1998, aborda la actividad deportiva organizada que practican los escolares en horario no lectivo y durante la escolarizaci¨®n obligatoria, pero no menciona nada sobre la seguridad de las canastas y porter¨ªas de futbito, que habitualmente son los elementos que m¨¢s utilizan los escolares. Seg¨²n la ley, la pr¨¢ctica del deporte escolar debe realizarse en instalaciones polivalentes, lo que, en opini¨®n del Ararteko, puede entrar en contradicci¨®n con las soluciones tradicionales de seguridad, como la fijaci¨®n al suelo del equipamiento deportivo m¨®vil. La legislaci¨®n educativa vasca tampoco se ha planteado esta cuesti¨®n.

La ausencia de una normativa hace que la seguridad de las canastas y de las porter¨ªas de futbito descanse en los ayuntamientos, ya que colaboran cediendo el uso de las instalaciones deportivas. Incluso en el caso de los colegios de educaci¨®n infantil de segundo ciclo (3-6 a?os) y primaria dependientes del Gobierno, corresponde a los municipios la conservaci¨®n, el mantenimiento y la vigilancia de los edificios y de su equipamiento. Para el Ararteko, el que la seguridad dependa de la buena disposici¨®n de los ayuntamientos es algo 'muy problem¨¢tico, como ya se ha demostrado en m¨¢s de una ocasi¨®n'.

Aunque, a menudo, los accidentes se deben a una mala utilizaci¨®n de las canastas y de las porter¨ªas por parte de los ni?os, las sentencias emitidas en los ¨²ltimos a?os por los diferentes tribunales no eximen de responsabilidad a las administraciones. Los fallos judiciales les reprochan no haber adoptado medidas para eliminar los riesgos por la utilizaci¨®n del equipamiento.