Cannes abre un ancho espacio cinematogr¨¢fico mediterr¨¢neo
'Intacto' destaca en el arranque de la Semana de la Cr¨ªtica.
Dos austeras pel¨ªculas, una israel¨ª y otra marsellesa, dieron impulso ayer a la idea de un espacio cinematogr¨¢fico mediterr¨¢neo, que el Festival de Cannes quiere abrir este a?o en un intento de dar noticia y llegar al fondo del reflejo que tienen en la pantalla los choques interiores que hoy golpean esta luminosa y torturada zona del mundo.
La pel¨ªcula israel¨ª se titula Kedma y es otra personal¨ªsima obra de Amos Gitai, uno de los m¨¢s arriesgados buscadores de formas que hay en el cine actual. Su audiencia, en consonancia con su estilo enrevesado y herm¨¦tico, es ciertamente muy poca, muy minoritaria, pero su estela de cineasta libre, de documentalista de los llamados duros, que filma sus ficciones de la vida real en Israel con el explosivo celuloide cr¨ªtico, se est¨¢ ensanchando sin cesar; y Amos Gitai comienza a ser uno de esos cl¨¢sicos vivientes del que se habla mucho y se conoce poco.
La pel¨ªcula marsellesa es Marie-Jo y sus dos amores. Est¨¢ escrita y dirigida por Robert Gu¨¦diguian, cineasta que tambi¨¦n se ha convertido en otro cl¨¢sico viviente, pero de muy distinto car¨¢cter que Gitai. El cine de Gu¨¦diguian es expansivo, poroso, abierto, muy emotivo y est¨¢ lleno de sensualidad, adem¨¢s de dotado de una fort¨ªsima capacidad de contagio emocional, que convierte a su director en el cineasta franc¨¦s sure?o por excelencia.
Amos Gitai tard¨® dos a?os en escribir Kedma y nada m¨¢s que un mes en filmarla. La pel¨ªcula narra, o m¨¢s bien representa de forma ritualizada, a trav¨¦s de largos y complicados planos secuenciales, en una busca incesante de formas ceremoniales de tragedia antigua, la aventura hist¨®rica del Kedma, el barco que traslad¨® en mayo de 1948 a los primeros emigrantes supervivientes del holocausto jud¨ªo europeo a una playa palestina. Ocurri¨® 14 d¨ªas antes de la proclamaci¨®n del Estado de Israel, y es 'la historia', dice Gitai, 'de los primeros jud¨ªos que saltaron de la boca de las c¨¢maras de gas nazis a los espacios abiertos de Palestina. Intento imaginar el recorrido de quienes salieron de Rumania, Rusia o Polonia, se subieron al barco y cayeron heridos o muertos en alguna de las batallas por la conquista de Jerusal¨¦n. Es la tragedia de los primeros jud¨ªos desplazados de Europa que a su vez desplazaron de sus tierras a los palestinos'.
A Robert Gu¨¦diguian le conocemos en Espa?a por Marius y Jeannette, Un lugar del coraz¨®n y La ciudad est¨¢ tranquila, y ahora recuperaremos su fogoso cine sentimental con Marie-Jo y sus dos amores, un relato que obedece con exactitud a su t¨ªtulo y representa el atolladero de una mujer enamorada por igual de su marido y de su amante. Es un tri¨¢ngulo que conduce a un drama muy duro, abocado a la tragedia, pero que discurre con suavidad y sin caer en el gestualismo. Ocurren en ¨¦l cosas situadas al borde del desmelenamiento melodram¨¢tico, muy sonoras, pero dichas a media voz. Hay en Gu¨¦diguian sensatez y madurez art¨ªstica, adem¨¢s de un abrumador conocimiento de su gente, que es la gente obrera del barrio de L'Estaque y del puerto de Marsella.
De refil¨®n, porque su filme busca otros territorios de la imaginaci¨®n, tambi¨¦n est¨¢ hoy en las pantallas de Cannes el espa?ol Juan Carlos Fresnadillo, cuyo Intacto ha llamado poderosamente la atenci¨®n a quienes mantienen el fuego sagrado de ese rinc¨®n de cin¨¦filos apasionados que es la Semana de la Cr¨ªtica, hasta el punto de que con este filme han abierto sus sesiones especiales, su cartel de lujo. Intacto fue presentado por la escritora Karine Cohen como un filme 'casi inclasificable, creador de un nuevo g¨¦nero nacido en Europa, que augura que la voz de Fresnadillo se dejar¨¢ o¨ªr en el cine que viene'.
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