Inteligencia espiritual

Un largo exilio mexicano y el mejor legado de la cultura republicana se aliaron para conformar la plural identidad literaria de Tom¨¢s Segovia (Valencia, 1927). Segovia transmite al lector, ante todo, una imagen de escritor cabal que los argumentos y desarrollos de estos 14 cuentos recogidos bajo el t¨ªtulo de Otro invierno confirman plenamente. Entre la soledad y la esperanza, como se pone de manifiesto en un texto conmovedor titulado Oto?o, la intimidad del narrador recupera los espacios generalmente reservados a las emociones socialmente mejor aceptadas, de manera que cada nuevo relato ampl¨ªa su personal universo hasta conquistar estadios de la memoria que s¨®lo los grandes maestros han sabido tratar de forma parecida. Eso sucede, por ejemplo, con los ecos chejovianos que dominan la excelsa narraci¨®n titulada La mina, emparentada por su combinaci¨®n de recuerdos y arquetipos con Mi vida y otras grandes piezas de la novela breve. Segovia dedica parte de su magisterio a poner en su lugar las verdades m¨¢s atroces a que se enfrenta el hombre, siendo la debilidad y la crueldad las m¨¢s sutilmente diseccionadas. La lectura de Otro invierno sugiere la posibilidad de que el acto de escribir, como el de leer, merezca el mayor de los respetos y ratifica plenamente el aserto de Octavio Paz sobre la inteligencia espiritual de Tom¨¢s Segovia, que lo es -dec¨ªa- 'a condici¨®n de saber que el esp¨ªritu no niega al mundo ni al demonio ni a la carne'. Sencillo en apariencia y, en el fondo, muy estimulante.