El cl¨¢sico intercontinental

Marcelo Bielsa, el seleccionador argentino, dijo ayer que Argentina frente Inglaterra era un 'cl¨¢sico'. Lo mismo hab¨ªa dicho un par de d¨ªas antes el capit¨¢n argentino, Juan Sebasti¨¢n Ver¨®n. Y as¨ª lo viven los p¨²blicos de los repectivos pa¨ªses: con la intensidad casi de un Barcelona-Real Madrid.

Si alquien lo duda, que oiga las palabras hace un par de meses de Roberto Perfumo, que fue capit¨¢n de la selecci¨®n argentina durante siete a?os y jug¨® dos veces contra los ingleses, la primera en el Mundial de 1966. Recordando el famoso encuentro de cuartos de final en el Mundial de 1986, cuando Maradona meti¨® un gol con la mano de Dios y otro, el llamado gol del siglo, tras regatearse a toda la defensa inglesa, Perfumo dijo: 'Para los argentinos, en 1986, ganar ese partido contra Inglaterra fue suficiente. Ganar el Mundial era secundario. Ganar a Inglaterra fue el objetivo principal'.

Algo muy parecido suelen decir los ficionados del Barcelona. Que ganar la Liga no es tan importante como ganar al Madrid. Por otro lado, hay pocos madridistas que tendr¨ªan la cortes¨ªa de no celebrar un gol frente el Bar?a que el ¨¢rbitro deber¨ªa de haber anulado. C¨¦sar Luis Menotti, ex seleccionador argentino, hablaba en una entrevista hace un par de a?os de c¨®mo hab¨ªan festejado los argentinos aquel gol con la mano de Maradona. 'La gente dec¨ªa, '?Mejor todav¨ªa! ?Mucho mejor que el gol haya sido tan injusto y tan cruel: a los ingleses les doli¨® m¨¢s!'.

?Qu¨¦ es lo que hace que la rivalidad Argentina-Inglaterra sea tan intensa y tan excepcional? Porque no existe nada remotamente que se parezca entre pa¨ªses de diferentes continentes, separados por un oc¨¦ano y 12.000 kilometros de distancia.

Aquel partido de 1986 llevaba, claro, una carga emotiva especial porque fue el primer encuentro entre los dos pa¨ªses despu¨¦s de la victoria brit¨¢nica en la guerra de las Malvinas. Pero ¨¦sa no es toda la historia. Puede uno remitirse a las Invasiones Inglesas de principio del siglo XIX, episodio c¨¦lebre en la historia argentina (aquella vez los argentinos ganaron), que todos los ni?os argentinos se saben de memoria. Aunque lo m¨¢s habitual en lo que a f¨²tbol se refiere es recordar aquel otro partido de cuartos de final, esta vez en el Mundial de 1966, cuando el capit¨¢n argentino Antonio Ratt¨ªn fue expulsado, se neg¨® durante diez minutos a salir del campo, e Inglatera acab¨® ganando 1 a 0.

Pero hay otro antecedente, m¨¢s conocido en Argentina que en Inglaterra. El 14 de mayo de 1953, seg¨²n los datos oficiales de la Asociacion de F¨²tbol Argentina, la selecci¨®n argentina venci¨® a la inglesa 3-1 en el estadio de River Plate. Caus¨® tanta alegr¨ªa la victoria en Argentina, la primera ante la naci¨®n que hab¨ªa tra¨ªdo el f¨²tbol al R¨ªo de la Plata, que se decidi¨® que de ah¨ª en adelante el 14 de Mayo ser¨ªa denominado el D¨ªa del Futbolista.

S¨®lo que hay un peque?o problema. La Asociac¨®n de F¨²tbol inglesa mantiene que ese partido nunca se llev¨® a cabo. En las estad¨ªsticas oficiales inglesas aquel partido no aparece. Los ingleses dicen que un encuentro s¨ª hubo entre jugadores ingleses y argentinos, pero que no fue un partido oficial. Con lo cual uno de los episodios m¨¢s gloriosos en la historia del f¨²tbol argentino es, seg¨²n los ingleses, puro cuento. Una gran mentira.

Aquel encuentro, o desencuentro, hace casi medio siglo marc¨® el destino de la que se convertir¨ªa en la gran, y ¨²nica, rivalidad intercontinental. Desde entonces, parece que los partidos entre Inglaterra y Argentina siempre generan controversia. Con lo cual, cada vez que juegan, un equipo u otro se acuerda de algo que ocurri¨® la vez anterior que exige la venganza.

Despu¨¦s del partido de 1966, que seg¨²n insiste a¨²n hoy Ratt¨ªn fue un robo, el entrenador ingl¨¦s, Alf Ramsey, tild¨® a los argentinos de 'animales'. Cuando las dos selecciones se volvieron a enfrentar ocho a?os despu¨¦s, los aficionados ingleses no se hab¨ªan olvidado. Se pasaron el partido gritando '?Animals! Animals!' Como para compensar, el ¨¢rbitro argentino del encuentro dio un penalti inexistente a Argentina para que su selecci¨®n pudiera empatar 2-2. Las dos selecsiones se vieron en el estadio de Boca Juniors tres a?os despu¨¦s, el partido acab¨® 1 a 1, con dos expulsados - uno de ellos Bertoni por quitarle un diente a Trevor Cherry de un pu?etazo-. Todav¨ªa hoy Bertoni lleva la cicatriz en el pu?o izquierdo.

Despu¨¦s vino el partido en el ¨²ltimo Mundial, en Francia 1998, donde Beckham fue expulsado tras un choque con Simeone. Toda Inglaterra recuerda hoy esa expulsi¨®n, y la derrota inglesa, como si fuera ayer. Una vez m¨¢s, uno de los dos equipos, esta vez Inglaterra, saldr¨¢ hoy al campo con ¨¢nimo de venganza, de reafirmar el honor nacional. Mientras que para los argentinos, igual que hace medio siglo, no hay placer m¨¢s grande que ganar a los ingleses.