Una septuagenaria vive desde hace 18 a?os con la aguja que un cirujano olvid¨® en su h¨ªgado
'Los m¨¦dicos dicen que es mejor no tocar ese objeto, pero me duele', se queja Isabel Soto
Isabel Soto, de 78 a?os, vive desde hace 18 con una aguja de cirujano, de forma curva y unos tres cent¨ªmetros de longitud, pegada al h¨ªgado. La aguja permanece ah¨ª desde que el 15 de octubre de 1984 a la mujer le extirparon unos peque?os quistes benignos. Los m¨¦dicos salieron satisfechos del quir¨®fano: la operaci¨®n hab¨ªa ido bien e Isabel iba a poder hacer vida normal en una semana. Lo que los m¨¦dicos no sab¨ªan, porque la hab¨ªan olvidado, es que donde antes estaban los quistes ahora hab¨ªa una de las agujas con las que le suturaron la herida de la operaci¨®n.
Isabel no ha perdido el buen humor en 18 a?os de convivencia con la aguja, pero tampoco olvida: 'Cada d¨ªa me acuerdo del m¨¦dico que me dej¨® aqu¨ª esta cosa extra?a', asegura mientras se lleva la mano al costado derecho.
Aunque los informes m¨¦dicos aseguran que la aguja no le ha provocado ning¨²n problema de salud, Isabel no se cansa de repetir que le molesta mucho. 'Tengo malestar y dolores en la zona. No puedo dormir de este lado [el derecho] y tambi¨¦n me impide cargar pesos', relata la mujer.
Pero a pesar de que Isabel se ha quejado 'mucho', los m¨¦dicos prefieren no operarla: 'Siempre me han dicho que no me har¨¢ ning¨²n mal porque no se mueve. Dicen que operar el h¨ªgado por esto ser¨ªa muy delicado y prefieren no hacerlo', contin¨²a Isabel.
Esta septuagenaria recuerda que el d¨ªa de la operaci¨®n estaba tranquila, aunque algo preocupada: 'Era la primera vez que me operaban, pero la verdad es que no ten¨ªa miedo. Siempre he confiado mucho en los m¨¦dicos y me hab¨ªan dicho que la operaci¨®n no era importante. S¨®lo me preocupaba todo el tiempo que estar¨ªa sin poder hacer vida normal', recuerda.
Vida normal
La 'vida normal' de Isabel en 1984 ten¨ªa tres ocupaciones principales: su trabajo como empleada del hogar de la misma familia para la que hab¨ªan trabajado su madre y su abuela, el chalet que ella y su marido se estaban construyendo en Villalba y su nieta, que 'hab¨ªa nacido hac¨ªa menos de un a?o'.
Isabel se recuper¨® con normalidad tras la operaci¨®n. Dos semanas despu¨¦s, le hicieron unas radiograf¨ªas para comprobar que los quistes hab¨ªan desaparecido. Fue entonces, al llevar la placa a su m¨¦dico de cabecera, cuando descubri¨® que la cicatriz no era el ¨²nico rastro que la operaci¨®n hab¨ªa dejado en su cuerpo.
'El m¨¦dico me pregunt¨® si se me hab¨ªa olvidado sacarme alg¨²n colgante o broche cuando me tom¨¦ la radiograf¨ªa. Le dije que no y entonces me pregunt¨® si recordaba haberme tragado alguna vez algo de metal. Tambi¨¦n le dije que no. Entonces me ense?¨® la radiograf¨ªa y me dijo: 'Vete al m¨¦dico que te oper¨® y dile que te explique qu¨¦ es esto', recuerda Isabel. Una l¨ªnea curva, claramente definida, ilustra en las radiograf¨ªas la presencia de un objeto extra?o. 'Fui al m¨¦dico que me oper¨® y el pobre hombre no sab¨ªa qu¨¦ decirme. Estuvo d¨¢ndole vueltas y al final me solt¨®: 'Mira, Isabel, lo siento mucho, pero creo que se nos olvid¨® retirarte una aguja cuando te cerramos la herida'.
Isabel decidi¨® demandar al hospital en 1996, 12 a?os despu¨¦s de ser intervenida quir¨²rgicamente. Ahora, la Secci¨®n Cuarta de la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional ha condenado al Insalud a indemnizar a Isabel con 3.006 euros.
Los magistrados Tom¨¢s Garc¨ªa Gonzalo, Ernesto Mangas Gonz¨¢lez, Lourdes Sanz Calvo y Juan Carlos Fern¨¢ndez de Aguirre, que actu¨® como ponente, confirman que el olvido de los m¨¦dicos no ha causado 'ning¨²n tipo de patolog¨ªa o enfermedad' a Isabel.
Secuela cr¨®nica
Sin embargo, sostiene la sentencia, la aguja olvidada constituye 'una secuela cr¨®nica, aunque asintom¨¢tica' y 'aunque remota, es perfectamente posible que la aguja desencadene en el futuro consecuencias que hoy son imprevisibles'.
'Entendemos que la actora [Isabel] debe ser resarcida de un da?o moral por tener que soportar la existencia de un cuerpo extra?o dentro de su organismo', concluye la sentencia. Los magistrados, en cambio, desestiman la indemnizaci¨®n que ped¨ªa el abogado de Isabel, 120.000 euros, y consideran que 3.006 euros es una compensaci¨®n suficiente.
A Isabel le parece poco este dinero, pero tampoco le da mucha importancia. 'Me parece muy poco por todo lo que he sufrido. Pero a mis 78 a?os me da un poco igual. Total, tampoco iba a tener tiempo de gastarme el dinero si me daban mucho m¨¢s', bromea.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.