La crisis del grupo Fiat fuerza la dimisi¨®n de su consejero delegado
Paolo Cantarella deja la firma con una deuda de 6.600 millones
La crisis de Fiat, primer grupo industrial privado italiano, entr¨® ayer en un nuevo territorio de incertidumbre con la dimisi¨®n de Paolo Cantarella, consejero delegado del grupo, en el que ha trabajado los ¨²ltimos 25 a?os. El actual presidente de Fiat, Paolo Fresco, asumir¨¢ de momento las dos funciones. La renuncia de Cantarella se justifica, seg¨²n el interesado, en la necesidad de 'dar una se?al fuerte de discontinuidad' en 'estos momentos complicados para el Grupo y para Fiat Auto, en particular'.
La dimisi¨®n se produce tambi¨¦n pocos d¨ªas despu¨¦s de que arreciaran los rumores sobre las presiones de Mediobanca, el banco de negocios accionista de Fiat, para cambiar la c¨²pula del grupo. Rumores desmentidos con energ¨ªa por el presidente honorario de Fiat, Gianni Agnelli, que reiter¨®, de nuevo, su confianza en la gesti¨®n de Cantarella y Fresco a su regreso, la semana pasada, de su visita m¨¦dica a los Estados Unidos.
M¨¢s all¨¢ del tono cort¨¦s con el que est¨¢ redactada, la nota de dimisi¨®n de Cantarella deja transparentar las razones de su ca¨ªda. El peso de los 'errores de direcci¨®n' a los que aludi¨® el mes pasado Umberto Agnelli, al analizar la crisis del Grupo Fiat, parece haber ca¨ªdo ahora sobre la cabeza de Cantarella,que consigui¨® eludir sus responsabilidades en la crisis del autom¨®vil en la remodelaci¨®n de hace seis meses, que le cost¨® el cargo a Roberto Testore, responsable de Fiat Auto. 'He decidido dimitir para que el presidente y los accionistas puedan decidir y actuar en el modo que les parezca m¨¢s ¨²til para la empresa', concluye el texto de renuncia.
El grupo Fiat atraviesa una de las peores crisis de su historia, debido, sobre todo, a los resultados desastrosos de Fiat Auto. Entre el 31 de marzo de 1999 y el 31 de marzo de 2002, la filial de autom¨®viles del grupo ha
3.000 millones de euros de patrimonio y, las p¨¦rdidas del primer trimestre de 2002, fueron de 429 millones de euros. Aparte de la crisis global del mercado del autom¨®vil, Fiat ha encajado el fracaso de sus ¨²ltimos modelos, Fiat Multipla y, sobre todo, Fiat Stilo, un coche pensado para un segmento de mercado de cierto nivel, que no ha podido competir, sin embargo, en precio y prestaciones con otros modelos de la competencia.
Lastrada por una deuda neta de 6.600 millones de euros, la Fiat ha tenido que recurrir a los bancos acreedores para reestructurar la deuda, ante el temor de una desclasificaci¨®n de la misma.
Ayer, la agencia Standard & Poor's, confirm¨® el rating de la deuda a breve periodo asignado a la Fiat, el A-3, no sin amenazar con una pr¨®xima revisi¨®n a la baja si el grupo no reduce las deudas a la mitad como ha prometido.
El patriarca Agnelli se confes¨® dolido por la decisi¨®n de Cantarella, a quien, dijo, 'est¨¢n ligados algunos de los momentos m¨¢s bellos de nuestra empresa en el ¨²ltimo decenio'. A Cantarella, a?adi¨®, 'est¨¢ ligada la expansi¨®n de Fiat en el mundo'. La respuesta de la Bolsa de Mil¨¢n fue, sin embargo, positiva a la salida de Cantarella, con un aumento del valor de las acciones del 3%.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.