Objetivo: eludir a Alemania
Espa?a, a la que le basta la igualada, y Sur¨¢frica compiten hoy por enfrentarse en la pr¨®xima eliminatoria a Irlanda
Espa?a se enfrenta hoy a Sur¨¢frica en el tercer partido de la primera fase. Tras sus victorias sobre Eslovenia y Paraguay (3-1 en ambos casos), ya est¨¢ clasificada para los octavos de final y tan s¨®lo el viaje en avi¨®n, de apenas media hora de duraci¨®n, entre Ulsan y Daejeon, el escenario de la cita, y la eliminaci¨®n de Francia a pies de Dinamarca turbaron ayer la somnolencia de los jugadores en las horas previas al ¨²ltimo entrenamiento.
Tras la pr¨¢ctica, eso s¨ª, toda la expedici¨®n encendi¨® el televisor para ver lo que de verdad les preocupaba: el partido entre Alemania y Camer¨²n. Gan¨® Alemania (2-0), Camer¨²n qued¨® eliminada y, de s¨²bito, los jugadores encontraron un motivo para competir por algo m¨¢s sustancial que los tres puntos. Ahora deber¨¢n ganar o, al menos, empatar ante Sur¨¢frica para quedar los primeros en el Grupo B y eludir el enfrentamiento, el s¨¢bado, con el cuadro germano. Todos prefieron como adversario, el domingo, a Irlanda, mucho m¨¢s asequible en teor¨ªa. 'Tenemos que evitar a Alemania', proclam¨® Ricardo. Pero exactamente lo mismo piensan los surafricanos: no s¨®lo quieren asegurarse el pase con las tablas, sino que aspiran a llegar m¨¢s lejos y para ello prefieren tener que batirse despu¨¦s con los irlandeses.
La sesi¨®n preparatoria introdujo la poca tensi¨®n de la jornada. Los espa?oles lo comenzaron y lo terminaron sin saber qui¨¦nes jugar¨¢n contra Sud¨¢frica. Con De Pedro sobrecargado y Trist¨¢n aquejado de un estiramiento muscular -ambos est¨¢n descartados-, Jos¨¦ Antonio Camacho se puso manos a la obra y experiment¨® posibles equipos durante una hora.
El seleccionador nacional prob¨® un centro del campo compuesto por Valer¨®n y Xavi; otro, por Albelda y Sergio; un tercero, por Baraja y Xavi, y un cuarto, por Xavi y Albelda. En las bandas ensay¨® con Baraja y Luis Enrique, por un lado, y Joaqu¨ªn y Mendieta, por otro. En la defensa, en la que jugar¨¢n Helguera y Nadal como centrales, ensay¨® con dos parejas de laterales: Puyol y Juanfran, los titulares, en un equipo y Torres y Romero, los suplentes hasta hoy, en otro. Si Valer¨®n o Baraja recibiesen una tarjeta amarilla de amonestaci¨®n se perder¨ªan el partido de los octavos, puesto que ya est¨¢n sancionados, un riesgo a tomar en consideraci¨®n.
'No hacemos vud¨²'
Sin avisar a la FIFA de su llegada al estadio de Daejeon, aparecieron por sorpresa los surafricanos. Su t¨¦cnico, Jomo Sono; los centrales Issa y Radebe y el delantero McCarthy, del Celta, fueron los encargados de cumplir con el protocolo de la organizaci¨®n, que les obliga a visitar la sede en la tarde anterior al partido.
'Se nos hizo tarde por problemas log¨ªsticos y porque vimos el partido de Francia', coment¨® Sono al llegar. Tras echar un vistazo al campo desde las gradas de Daejeon, los futbolistas comprobaron que el escenario se parece m¨¢s que ning¨²n otro a un platillo volante, adornado con anillos de luces de colores como se acostumbra en la imaginer¨ªa de la ciencia ficci¨®n.
El empate ante Paraguay y la victoria sobre Eslovenia ponen a Sur¨¢frica delante de una ocasi¨®n privilegiada para entrar en la historia y clasificarse por primera vez para los octavos de final de un Mundial. S¨®lo necesita un punto.
En principio, Sono alinear¨¢ a su equipo de gala, plagado de futbolistas que juegan en Europa, con Radebe (Leeds) en el centro de la defensa, Carell (Stuttgart) en el lateral derecho, Nomvethe (Udinese) como extremo diestro, Fortune (Manchester United) en el extremo izquierdo y Zuma (Copenhague) en la punta junto a McCarthy.
'?Nosotros no hacemos vud¨² como Camer¨²n. Nosotros estamos por el juego limpio!', se defendi¨® McCarthy cuando le preguntaron por las pr¨¢cticas de hechicer¨ªa que se denuncian en su selecci¨®n, como, por ejemplo, untar las piernas de los jugadores con sangre de gallina para adquirir m¨¢s energ¨ªa o meterles alas de abeja entre las medias y las pantorrillas para que puedan correr con mucha mayor rapidez.
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