El abrazo de dos viejos perdedores

Hace seis meses, Luiz Felipe Scolari se paseaba cabizbajo por la ciudad surcoreana de Busan, donde se iba a celebrar en aquellos d¨ªas el sorteo del Mundial. Siempre con un ch¨¢ndal verde pistacho, de los que ya no se huelen ni en los rastrillos, a Scolari se le ve¨ªa angustiado, porque Brasil hab¨ªa patinado m¨¢s de la cuenta en la fase de clasificaci¨®n. Se desahogaba corre que te corre por la playa cercana al hotel en el que se hospedaba, en el que apenas despert¨® la curiosidad de alg¨²n botones. Era un perdedor, al lado de Milutinovic, siempre colgado de un micr¨®fono, o de Lemerre, que se quitaba a los cazaut¨®grafos de encima como el que se sacude la caspa. Cerca andaba tambi¨¦n Voeller, mal afeitado, con aires de condenado. Alemania hab¨ªa sido zarandeada por Inglaterra (1-5) y hab¨ªa tenido que jugarse el arroz con Ucrania en una repesca.

Cierto d¨ªa, seg¨²n revel¨® ayer Scolari, ambos se encontraron. Se hablaron de castigado a castigado. Se prestaron mutuamente el hombro, se sentaron frente a frente cada uno en su div¨¢n y decidieron hacer un brindis. 'Nos abrazamos y decidimos que nos ver¨ªamos en la final de Yokohama'. Y as¨ª ha sido, por mucho que entonces resultara una quimera. Uno ten¨ªa a un pa¨ªs azot¨¢ndole -Scolari- y otro recib¨ªa incluso amenazas personales -Voeller-. El f¨²tbol da tantas vueltas que su brindis se ha cumplido.

Scolari aleg¨® que la sustituci¨®n, ayer, de Ronaldo fue con la intenci¨®n de darle descanso y permitirle afrontar la final en las mejores condiciones f¨ªsicas posibles. 'No estoy preocupado por ¨¦l', dijo. 'Cuando el otro d¨ªa vi que se hab¨ªa cambiado el corte de pelo entend¨ª que estaba bien'. El seleccionador brasile?o relacion¨® el triunfo sobre Turqu¨ªa con factores que trascienden al juego en su sentido m¨¢s estricto. 'Me he hado cuenta de que, para llegar a la final, no basta con practicar un buen f¨²tbol. Tambi¨¦n hay que poner coraz¨®n, y a este equipo le sobra coraz¨®n, como ha demostrado otra vez'. El t¨¦cnico elogi¨® al equipo turco: 'Es muy fuerte y nos ha impedido lograr lo que yo pretend¨ªa: ganar por muchos goles'.

Senol Gunes, seleccionador turco, considera que su equipo fue v¨ªctima de la falta de experiencia y el exceso de presi¨®n. El temperamental Hasan Sas resumi¨® el sentir de los jugadores turcos. 'Ahora el mundo nos mira de otra manera', dijo. 'Estamos tristes. Pero, la mirada del mundo entero hacia la selecci¨®n turca ha cambiado gracias al juego que hemos realizado. Tenemos un equipo joven. En lo sucesivo nuestros rivales nos van a temer'.