"Me voy sin mirar atr¨¢s"
Pregunta. ?Deja la pol¨ªtica porque se siente malquerida por el Gobierno y por su partido?
Respuesta. Absolutamente no. Me siento privilegiada porque Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar me dio la oportunidad de estar en su primer gabinete. Y cuando volv¨ª al Congreso, la presidencia de la mejor comisi¨®n, la de Exteriores, en un semestre espectacular: la presidencia de la Uni¨®n Europea.
P. ?Le ha costado muchos rosarios decidir su marcha a una multinacional de inform¨¢tica?
R. No, absolutamente. Yo el rosario lo puedo rezar todos los d¨ªas, pero ¨¦sta es una decisi¨®n libre y pensada.
P. No me dir¨¢ que de verdad entiende de ordenadores.
R. Me toca dirigir a los que saben mucho de esas cosas, y aplicarlas en la vida real.
P. ?Qu¨¦ tiene en el disco duro?
R. Los recuerdos m¨¢s bonitos de mi vida. En cambio, procuro hacer un backup continuo con los momentos malos.
P. ?Se equivocaban quienes le vieron un punto Barbie?
R. Creo que cuando las personas, y sobre todo las mujeres, somos conocidas, una forma de devaluar lo que hacemos es fijarse en cosas accesorias.
P. Era la candidata de Fraga para La Moncloa. Y en el 89 afirm¨® que estaba preparada.
R. No me hubiera importado, si me hubiera tocado asumir esa responsabilidad. Pero creo que la decisi¨®n fue bien tomada, y a las pruebas me remito.
P. Tras visitar a John Major, dijo que le consideraba soso y aburrido 'como el nuestro', pero que no es as¨ª. ?'El nuestro' es soso y aburrido?
R. La imagen, dije. La que yo ten¨ªa de John Major es la misma que se puede tener del jefe, de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar. Y, cuando les conoces, te das cuenta de que son gente francamente divertida.
P. Encuentra al 'nuestro' tronchante.
R. Bueno, tampoco hay que pasarse, ?no? [Risas]
P. ?Por qu¨¦ le duraban tan poco los colaboradores en el Ministerio: cinco jefes de prensa, tres jefes de gabinete, otros tantos secretarios generales...?
R. Algunos de los que se fueron no hab¨ªan sido elegidos para el puesto que deb¨ªan ocupar, y a otros les sirvi¨® de aut¨¦ntico trampol¨ªn trabajar conmigo.
P. ?Con qu¨¦ nos sorprender¨¢, tras haberla visto disfrazada de pastorcilla y de motera, todo cuero?
R. Yo no me he disfrazado m¨¢s que cuando he hecho teatro. Visto con toda la libertad del mundo, y me parece que al campo no se debe ir con tacones, y que cuando se va en moto hay que ponerse un traje adecuado.
P. ?Los fabricantes de laca est¨¢n desolados por sus cambios capilares?
R. Es tan divertido que dijeran que yo uso laca... Nunca la he usado, y no he cambiado de imagen. Tengo un pelo muy agradecido, y sigo arregl¨¢ndomelo yo.
P. ?A usted qu¨¦ le debe Espa?a?
R. Creo que he aprovechado las oportunidades y, por tanto, no siento que tenga que cobrarle ninguna deuda a Espa?a.
P. ?Y usted qu¨¦ le debe al Opus?
R. El haberme acercado a un Dios padre que me ha llevado a aceptar cosas que no tienen justificaci¨®n ni explicaci¨®n humanas, como la muerte de una hija.
P. ?Qu¨¦ tiene de ambiciosa?
R. Tengo de coherente y de firme en las convicciones o en las decisiones que tomo. Ambiciosa, lo justo. La naturalidad es lo m¨ªo, fundamentalmente.
P. ?Es racional o pasional?
R. Pasional, s¨ª. Me apasiono mucho con las cosas, con la vida. Pienso que la vida es corta, y la quiero vivir con intensidad.
P. ?C¨®mo desarrollar¨¢ tanta pasi¨®n entre ordenadores?
R. La vida de las nuevas tecnolog¨ªas nos har¨¢ m¨¢s dem¨®cratas a todos, porque nos va a exigir participaci¨®n. Estoy convencida de que el ordenador nos har¨¢ la vida m¨¢s agradable, porque nos va a dejar m¨¢s tiempo de ocio.
P. ?Qu¨¦ le dijo el jueves a su esca?o, al despedirse de ¨¦l?
R. De momento, tuve la suerte de comprarme otro para sentarme en casa si un d¨ªa me entra el mono [risas]. Y arengar¨¦ a mis hijos, si me quieren escuchar.
P. ?Qu¨¦ deja en el hemiciclo?
R. Muchas horas de trabajo. No me dejo ilusiones perdidas. Creo que han valido la pena el esfuerzo y los sinsabores. Y dejo muchos compa?eros, no s¨®lo del Partido Popular, y compa?eras, sobre todo del partido socialista.
P. ?Volver¨ªa a la pol¨ªtica si fuera para presidir el Gobierno?
R. Veo que le gusta hablar de muchas utop¨ªas y futuribles [r¨ªe]. En pol¨ªtica nunca se puede decir nunca jam¨¢s; pero, sinceramente, me voy sin mirar atr¨¢s.
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