El Gobierno cerrar¨¢ en agosto seis a?os de actuaciones contra el lindane

El Gobierno vasco concluir¨¢ este verano todas sus actuaciones para neutralizar el problema del lindane, iniciadas hace ya m¨¢s de seis a?os. La finalizaci¨®n del dep¨®sito de Barakaldo, que albergar¨¢ 325.000 metros c¨²bicos de suelos t¨®xicos provenientes de siete municipios de la Margen Izquierda, es la ¨²ltima de las tres principales infraestructuras acometidas y quedar¨¢ sellada a fines de agosto, seg¨²n un portavoz de Medio Ambiente. Estas actuaciones han supuesto una inversi¨®n global de 55,1 millones de euros, de los que 38 han sido financiados por la Uni¨®n Europea.

La celda de lindane de Barakaldo -una vaguada sita junto a un antiguo vertedero que entre ocho capas de tierras y drenaje alberga los suelos contaminados- est¨¢ a punto de concluirse. S¨®lo queda terminar el traslado, iniciado el pasado lunes, de tierras del ¨²ltimo de los 22 focos de este pesticida eliminados en siete municipios de la Margen Izquierda: el ¨¢rea donde se pretende ubicar un parque de ocio en Barakaldo, junto al puente de Rontegi, donde se localizan 20.000 metros c¨²bicos de suelos afectados. 'Ahora hay 304.000 metros c¨²bicos compactados en la celda y con esto se llegar¨¢ a 325.000', asegura un portavoz de la sociedad p¨²blica ambiental Ihobe, quien recuerda que la capacidad l¨ªmite del dep¨®sito es de 340.000 metros c¨²bicos.

Ihobe calcula que las tierras de este ¨²ltimo foco quedar¨¢n completamente trasladadas en unas dos semanas. El sellado del dep¨®sito y la revegetaci¨®n de la celda se prolongar¨¢ en conjunto unos dos meses. 'Todo estar¨ªa concluido a finales de agosto', a?ade dicho portavoz.

El dep¨®sito de lindane es la principal de las tres infraestructuras acometidas por el Gobierno ante el problema de este pesticida, producido por dos f¨¢bricas entre 1947 y 1987 en Barakaldo y Erandio, que dejaron 82.000 toneladas de residuos en cerca de 35 focos, casi todos ellos situados en el ¨¢rea metropolitana bilba¨ªna.

Su construcci¨®n empez¨® en noviembre de 1999 y, seg¨²n los ¨²ltimos datos del Gobierno, ha requerido una inversi¨®n de 35,4 millones de euros. Pese a que en principio iba a albergar tierras de 13 vertederos, se han ampliado hasta 22.

A finales del pasado a?o concluyeron las tareas de la planta de lindane puro de Barakaldo, ubicada en una de los dos f¨¢bricas que gener¨® los residuos, y que elimin¨® 4.000 toneladas de desechos del pesticida en estado puro. Esta infraestructura, que estuvo funcionando dos a?os y, una vez concluida su labor, fue demolida para enterrarla en el dep¨®sito de Barakaldo, ha costado 12,5 millones de euros.

La primera infraestructura que se acometi¨® fue la celda de lindane del aeropuerto de Bilbao, concluida en 1998 y muy similar a la instalaci¨®n de Barakaldo. La diferencia es que alberga la tercera parte de suelos contaminados, 108.000 metros c¨²bicos. Su coste fue de casi 7,20 millones de euros.

Con ello, las tres infraestructuras habr¨¢n supuesto un gasto de 55,1 millones de euros, aunque de ellos 38 se han sufragado con cargo a la Uni¨®n Europea. El monto global se acerca al triple de la inversi¨®n anunciada en 1996, cuando se habl¨® de unos 21 millones de euros.

El ¨²nico proyecto sin ayudas comunitarias fue el primero, la celda del aeropuerto, para el que el Ejecutivo no pidi¨® subvenciones. La plataforma ecologista Lur Maitea, que desarrolla una campa?a de oposici¨®n a estas infraestructuras, ha asegurado que, en principio, se solicit¨® la subvenci¨®n, pero se retir¨® cuando este colectivo plante¨® una queja ante la UE.

Las autoridades comunitarias han certificado la ilegalidad del dep¨®sito de lindane del aeropuerto por la falta de la declaraci¨®n de impacto ambiental, con la que s¨ª cuentan las otras dos infraestructuras. Tras una investigaci¨®n de tres a?os, en julio de 2001 consider¨® que existe una infracci¨®n contrastada y ahora est¨¢ pendiente la decisi¨®n de llevar el asunto al Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas. El Departamento de Medio Ambiente ha defendido que ha adoptado medidas similares a las que contiene una declaraci¨®n de impacto.

En cualquier caso, una hipot¨¦tica condena no tendr¨ªa efectos pr¨¢cticos, seg¨²n los medios consultados, porque al tratarse de un aspecto formal -falta de un requisito antes de iniciarse las obras- no existe posibilidad de reparaci¨®n posterior.

El rechazo de Lur Maitea a estas infraestructuras se basa en que 'atienden a especulaciones urban¨ªsticas y econ¨®micas obviando cualquier criterio medioambiental'. Los ecologistas culpan al Gobierno de ocultar informaci¨®n 'para que los ciudadanos no conozcan el polvor¨ªn' en que est¨¢n inmersos.