Paul Preston asegura que Franco amans¨® a la Falange y que se mofaba de ella

El hispanista Paul Preston, que dirige el curso La Espa?a de los a?os cuarenta en los Cursos de Verano de El Escorial, habl¨® ayer del proceso por el que Franco 'amans¨®' a la Falange. Seg¨²n Preston, Franco sol¨ªa referirse a la Falange con frases como 'los falangistas no son m¨¢s que chulos de algarada' y se mofaba de ellos diciendo: 'El Movimiento es la claqu¨¦ que me acompa?a en mis viajes por Espa?a'. 'Franco no crey¨® en su propia legitimidad y la despreciaba ol¨ªmpicamente', apunt¨® el historiador.

En 1937, Franco asumi¨® el mando de todos los grupos pol¨ªticos de la zona nacionalista -falangistas, carlistas y mon¨¢rquicos- y uni¨® sus fuerzas en un solo partido, la Falange Espa?ola Tradicionalista y de las JONS. De este modo, 'la Falange acept¨® a Franco como su jefe nacional y diluy¨® sus ambiciones ideol¨®gicas para evitar conflictos con la Iglesia cat¨®lica'.

Pero la rivalidad entre las facciones de los militares y de los falangistas era un hecho y fue minando el poder de los segundos. 'Hasta la ca¨ªda de Hitler, el tono ideol¨®gico del r¨¦gimen fue obra de la Falange. Esto fue un reflejo de la circunstancia externa del ¨¦xito alem¨¢n. Para el mundo exterior, Falange y franquismo fueron consustanciales, pero esta idea era ilusoria aunque comprensible', dijo Preston.

La Falange proporcionaba la estructura, el nombre, el vocabulario y los mecanismos de propaganda del partido ¨²nico, pero su poder siempre fue d¨¦bil y nunca pudo igualarse a los nazis alemanes o a los fascistas italianos. 'La Falange no hab¨ªa conquistado el Estado como consecuencia de sus propios esfuerzos, sino que hab¨ªa cabalgado hacia el poder montada en el caballo militar. Y perdi¨® su dinamismo aut¨®nomo cuando pas¨® a ser parte de la estructura burocr¨¢tica del nuevo Estado', a?adi¨® el historiador. Aun as¨ª, a Franco no le interes¨® abandonar la Falange, porque, como concluy¨® Preston, 'no ve¨ªa ninguna ventaja en deshacer una organizaci¨®n que, domada ya desde hace tiempo, le suministraba el apoyo ferviente de miles de aduladores'.