?Atentos a los taxistas!
El s¨¢bado 29 llegu¨¦ a Madrid procedente de Bruselas a las 10.30; llevaba mucha urgencia, por lo que fui uno de los primeros en salir.
En la salida de pasajeros no exist¨ªa nadie que ordenara la recogida de pasajeros, por lo cual los conductores eleg¨ªan a los clientes que llevaban mucho equipaje. Mi malet¨ªn de mano, por lo visto, no encajaba en el esquema de preferencias, por lo que me enviaron sucesivamente al siguiente.
Cuando llegu¨¦ al ¨²ltimo taxi de ese grupo, el conductor me indic¨® que el punto de recogida estaba al principio. Le indiqu¨¦ que ya hab¨ªa estado all¨ª. Sin mediar m¨¢s comentario, aceler¨® el coche y se puso a la cabeza del nuevo grupo de taxis que ocupaban progresivamente las plazas. Me aproxim¨¦ nuevamente al citado coche y le ped¨ª que me llevara a mi domicilio, pero insisti¨® en su negativa. Sub¨ª al coche, intent¨¦ persuadirlo, le expliqu¨¦ la prisa que ten¨ªa; ¨¦l, molesto con mi postura, en una actitud violenta, me condujo fuera del sector de pasajeros profiriendo un rico vocabulario de insultos; par¨® el coche delante de otro grupo de taxistas que esperaban el turno, sac¨® una barra de hierro y una cadena y me propin¨® una paliza en regla; uno de los conductores lo apart¨®, despu¨¦s de lo cual mi agresor huy¨® r¨¢pidamente. Con estupor, me quej¨¦ de la agresi¨®n; pregunt¨¦ si alguien pod¨ªa socorrerme, y uno de ellos me auxili¨®.
Yo me pregunto: ?qui¨¦n o qui¨¦nes son los responsables de este hecho bochornoso y humillante?: ?la administraci¨®n del aeropuerto, que brilla por su ausencia; la Polic¨ªa Municipal, que vigila la seguridad ciudadana; la polic¨ªa de Tr¨¢fico? ?Qui¨¦n vigila las faltas y los excesos cometidos por taxistas sin escr¨²pulos? Puedo entender ahora que parte de las agresiones a los taxistas tienen su origen en el comportamiento provocador.
Aqu¨ª se imponen reglas precisas de control y transparentes para el p¨²blico que garanticen permanentemente nuestra seguridad; no basta una licencia y un carn¨¦ cuando hechos como ¨¦stos pueden dar lugar a actos criminales de mayor envergadura.
Espero que ¨¦sta sea la gota que colme el vaso para que los servicios correspondientes regulen de verdad la actividad de los taxistas en el aeropuerto.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.