Gendarmes marroqu¨ªes ocupan un islote espa?ol deshabitado cerca de Ceuta
Barcos de la Armada y la Guardia Civil rodean el pe?¨®n, donde ondea la bandera marroqu¨ª
Un pelot¨®n de gendarmes de Marruecos (siete o 12, seg¨²n las fuentes) desembarc¨® ayer en la isla de Perejil, un pe?¨®n deshabitado al oeste de Ceuta, cuya soberan¨ªa espa?ola discute Marruecos. Los militares, que hab¨ªan montado una tienda de campa?a y una bandera de Marruecos, fueron avistados por una patrullera de la Guardia Civil, cuyos agentes les pidieron que se marcharan, a lo que aqu¨¦llos se negaron. Espa?a ha mandado dos patrulleras de la Armada y otra de la Guardia Civil, ya que la toma contin¨²a. Fuentes marroqu¨ªes alegan que sus agentes participaban en una operaci¨®n antidroga.
El incidente comenz¨® ayer por la ma?ana, cuando, seg¨²n fuentes gubernamentales espa?olas, una patrullera de la Armada de Marruecos desembarc¨® en Perejil a doce gendarmes, incluido un comandante, seg¨²n unas fuentes, y siete militares, seg¨²n otras. Sobre el mediod¨ªa, una embarcaci¨®n del Servicio Mar¨ªtimo de la Guardia Civil de Ceuta avist¨® una tienda de campa?a y una bandera de Marruecos ondeando en el pe?¨®n, completamente deshabitado, por lo que se acercaron para comprobar qu¨¦ ocurr¨ªa.
Los agentes espa?oles desembarcaron y se encararon con los marroqu¨ªes. Tras una breve discusi¨®n sobre a qui¨¦n pertenece la roca, donde se supone que estaba una de las columnas de H¨¦rcules, los gendarmes de Marruecos instaron a los espa?oles de malos modos para que se fueran e incluso amenazaron con dispararles 'por equivocaci¨®n' debido al nerviosismo que hab¨ªa provocado el incidente.
La dotaci¨®n de la patrullera de la Guardia Civil opt¨® por abandonar la zona y comunicar el incidente a sus superiores. Las fuentes consultadas indicaron que la Armada envi¨® a la zona dos de sus barcos patrulla artillados (el P-114 y el P-12) para intentar solventar la situaci¨®n. Sin embargo, al cierre de esta edici¨®n, fuentes gubernamentales explicaron que el incidente continuaba y que ya hab¨ªa tomado cartas en el asunto el Ministerio de Asuntos Exteriores.
El tratado hispanofranc¨¦s de 1912, que delimitaba la zona del Protectorado espa?ol de Marruecos, no hace referencia alguna a Perejil, pero tras la formalizaci¨®n del protectorado, la isla pas¨® a plena ocupaci¨®n espa?ola. A comienzos de los a?os noventa, Marruecos protest¨® porque Perejil aparec¨ªa inclu¨ªda en el borrador de Estatuto de Autonom¨ªa de Ceuta preparado por el Gobierno del PSOE. El islote no apareci¨® finalmente mencionado en el estatuto definitivo.
Espa?a sigue considerando, no obstante, que la isla Perejil est¨¢ bajo su soberan¨ªa, algo que defiende frente a Marruecos, como hace dos siglos mantuvo incluso con las armas frente a los designios anexionistas de Gran Breta?a.
Fuentes diplom¨¢ticas espa?olas consideraron ayer el incidente como la 'devoluci¨®n' del ocurrido en Alhucemas. El ministro de Asuntos Exteriores de Marruecos, Mohamed Benaissa, convoc¨® el mi¨¦rcoles de la semana pasada al embajador de Espa?a en Rabat, Fernando Arias-Salgado, para protestar por el despliegue, a principios de semana, en torno al pe?¨®n de Alhucemas de cinco buques de guerra de la Armada y de un helic¨®ptero. Se trataba de un ejercicio de fin de curso de los guardamarinas de la Escuela Naval de Mar¨ªn (Pontevedra) que a mediados de mes recibir¨¢n sus despachos. Las explicaciones recibidas no contentaron a Marruecos.
La ocupaci¨®n marroqu¨ª del islote coincide con la celebraci¨®n de la boda del rey de Marruecos, hoy en Rabat, a la que, despu¨¦s de que el Gobierno descartara cualquier participaci¨®n mientras el embajador marroqu¨ª no regrese a Madrid, no ha sido invitado ning¨²n miembro de la familia real espa?ola. Fuentes marroqu¨ªes indicaron ayer que sus gendarmes hab¨ªan desembarcado en la zona para desarrollar una operaci¨®n policial contra los traficantes de hach¨ªs, del que Marruecos es el primer productor mundial.
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