Una obra de arte bajo la suciedad

La restauraci¨®n en un taller de B¨¦tera del cuadro del obispo Gallo, colgado en la Catedral de Orihuela, ha arrojado un descubrimiento singular: la obra no es de un autor anodino, sino de uno de los grandes maestros del retrato: S¨¢nchez Coello, introductor de este g¨¦nero cortesano del que tomar¨ªan el relevo figuras de la talla de Vel¨¢zquez.

El equipo que trabaja en la restauraci¨®n de las obras que compondr¨¢n la exposici¨®n La Luz de las Im¨¢genes ha encontrado durante la limpieza del cuadro una firma inequ¨ªvoca -Alfonsus Santius F- oculta hasta ahora por la superposici¨®n de capas y por la acumulaci¨®n de suciedad. La firma se corresponde con la r¨²brica de S¨¢nchez Coello, pintor de c¨¢mara de Carlos V y de su hijo Felipe II que vivi¨® en el siglo XVI y que naci¨® en el seno de una familia de origen portugu¨¦s. Detr¨¢s del cuadro del obispo se ha descubierto otro lienzo, muy deteriorado, cuyo origen se analiza ahora. Aunque los descubridores prefieren a¨²n resguardarse en la esfera de la hip¨®tesis, hay algunas coincidencias que dan solidez a la conjetura: S¨¢nchez Coello destac¨® principalmente por su labor como retratista de la Corte y tambi¨¦n el obispo Gallo, que inaugur¨® la di¨®cesis de Orihuela por mandato de Felipe II, ten¨ªa una estrecha relaci¨®n con el rey. Se especula por tanto que el pintor pod¨ªa haber conocido al can¨®nigo en Madrid o en Salamanca, donde Gregorio Antonio Gallo Andrade ejerci¨® de profesor de teolog¨ªa desde 1566.

Debajo del cuadro del obispo Gallo se ha descubierto otro lienzo cuyo origen se analiza

S¨¢nchez Coello fue pintor de c¨¢mara de Carlos V y de su hijo Felipe II

De igual modo que la obra de S¨¢nchez Coello est¨¢ en buena parte determinada por su proximidad al monarca, la carrera eclesi¨¢stica del primer obispo de Orihuela se sustenta en sus fuertes v¨ªnculos con el hijo del emperador Carlos V. '?l fue el hombre de confianza del monarca cuando se produjo la divisi¨®n de la di¨®cesis de Cartagena. Se necesitaba a una persona con capacidad pol¨ªtica debido al conflicto frontal que exist¨ªa entre ambas di¨®cesis y el obispo Gallo respond¨ªa a ese perfil. Adem¨¢s, fue encomendado para iniciar la evangelizaci¨®n de las gentes que habitaban en los pueblos dispersos y para reconvertir a los moriscos', comenta Jos¨¦ Antonio Mart¨ªnez, comisario eclesi¨¢stico de La Luz de las Im¨¢genes.

El cuadro fue pintado en la ¨¦poca de m¨¢ximo esplendor del artista, 1576, y casualmente un a?o despu¨¦s fallec¨ªa el obispo Gallo. Si se ratifica la suposici¨®n que barajan los expertos, el lienzo no s¨®lo adquirir¨ªa una dimensi¨®n art¨ªstica mayor, sino que la trayectoria de S¨¢nchez Coello se ver¨ªa enriquecida. 'Por un lado se ampliar¨ªa su cat¨¢logo de obras pero al mismo tiempo se confirmar¨ªa su faceta como retratista de obispos, ya que dos a?os antes hab¨ªa pintado al obispo salmantino de Covarrubias', a?ade S¨¢ez.

A pesar de que los se?uelos de la autor¨ªa son expl¨ªcitos, hasta que se emprendi¨® el trabajo de restauraci¨®n no se intu¨ªa que la obra pudiera pertenecer a un artista tan reputado del siglo XVI, heredero de Tiziano e impulsor del retrato de Corte.

Los t¨¦cnicos que trabajan en B¨¦tera est¨¢n sorprendidos con otro hallazgo: una de las piezas escult¨®ricas m¨¢s antiguas de la Comunidad. Se trata de una Virgen con el ni?o en brazos, y la granada que Jes¨²s lleva en la mano permite aventurar que la periodicidad de la obra es mucho m¨¢s antigua de lo que se estimaba. Seg¨²n la jefa del taller, Fina Mart¨ªnez, 'la escultura es de final del siglo XV, cuando se produce la unificaci¨®n de Granada'. La obra adorna la Capilla de la Comuni¨®n de la iglesia de Santas Justa y Rufina y hasta ahora se cre¨ªa que era un exponente de la escultura del siglo XVII. Los expertos no han podido precisar qui¨¦n es el autor.