El conflicto de Perejil

Espa?a reconquista Perejil al d¨ªa siguiente de un debate sobre el estado de la naci¨®n que parece haber ganado Zapatero, e inmediatamente se deja de hablar del debate y se desata un entusiasmo patri¨®tico de ambiente preb¨¦lico. Tanto que, seg¨²n una encuesta electr¨®nica de EL PA?S, el 78% de los votantes est¨¢n de acuerdo con la intervenci¨®n espa?ola (en la del diario El Mundo llega al 91%).

Yo no puedo dejar de acordarme de los bombardeos de Estados Unidos en Irak cuando Clinton se enfrentaba al juicio por el caso Lewinski, o de la toma de las Malvinas por Argentina para desplazar la atenci¨®n de los problemas de la dictadura. Y pienso que lo han conseguido, hemos ca¨ªdo en su juego y nos olvidaremos de los verdaderos problemas escondiendo la cabeza en un islote de 13,5 hect¨¢reas a 200 metros de Marruecos y 10 kil¨®metros de Ceuta, habitado por un pu?ado de cabras y del que no hab¨ªamos o¨ªdo hablar en nuestra vida. Eso s¨ª, luego insistiremos en que Gibraltar es espa?ol por razones geogr¨¢ficas, y uno de los ¨²ltimos reductos coloniales del mundo, claro que la coherencia parece ser una virtud antipatri¨®tica y cada vez menos popular, o deber¨ªa decir Popular, claro que, viendo las encuestas, me temo que cada vez es menos espa?ola.- Francisco Velasco Guevara. Santander.

Que Aznar se nos presente con ¨ªnfulas de conquistador sobre un pe?¨®n sobre el cual no existe un estatus de soberan¨ªa espa?ola, me parece el albur de un merolico que atiza el chovinismo como una jugarreta preelectoral. Pero que el PSOE entre al juego como un enano de palacio me parece el colmo de los desvar¨ªos pol¨ªticos. Espa?a, la amada Espa?a, no tiene ning¨²n estatus jur¨ªdico leg¨ªtimo sobre la pe?a Perejil, de eso no hay duda. Pero s¨ª lo tiene sobre Gibraltar, luego entonces la pregunta se torna m¨¢s que leg¨ªtima: ?por qu¨¦ Aznar no planta la banderita en el Pe?¨®n? La respuesta es sencilla, porque, siendo un demagogo, sabe bien que el tufillo nacionalista s¨®lo le sirve para dividir a¨²n m¨¢s a Espa?a.- Manuel Acu?a. Madrid.

Marruecos es el que ha provocado la intervenci¨®n militar con su ocupaci¨®n, sin sentido aparente, de la isla Perejil. As¨ª pues, que no tiren la piedra y escondan la mano haci¨¦ndose pasar por v¨ªctimas de una 'declaraci¨®n de guerra'. ?Qui¨¦n se la declara a qui¨¦n?

Quisiera aprovechar esta carta para agradecer a las Fuerzas Armadas la intervenci¨®n que llevaron a cabo. Nos han demostrado, una vez m¨¢s, que podemos confiar en ellos y dormir tranquilos, pues siguen velando por nuestra seguridad.- Montse Garijo. Madrid.

?Tanta prisa hab¨ªa en ocupar ese islote? ?Tan formidable es su valor estrat¨¦gico, comercial? ?Tan vital nos resulta ese ¨¢rido pe?asco est¨¦ril y despoblado pegado a la costa de Marruecos que no pudimos esperar ni cuatro d¨ªas a que la v¨ªa diplom¨¢tica confirmara la raz¨®n que todo el mundo nos daba y que ahora hemos perdido en esa fulminante demostraci¨®n de fuerza? ?Acaso hubi¨¦ramos actuado con la misma contundencia si los seis soldaditos moros que lo ocupaban llevaran uniforme de la Marina francesa, o de la inglesa, no digo ya si fueran marines USA?

Pero, sobre todo, si tuvo que ser as¨ª, ?a qu¨¦ viene lo de la banderita en lo alto del pedrusco? Porque ellos lo hicieron, entonces nosotros m¨¢s y m¨¢s alto. ?Qu¨¦ se gana humillando de esa manera al pueblo marroqu¨ª -no a su Gobierno, no a sus l¨ªderes- con esa arrogante demostraci¨®n de poder¨ªo? ?No conocemos la importancia de los s¨ªmbolos? ?Qu¨¦ se gana provocando en el coraz¨®n de los vecinos la punzada de odio por algo a lo que ni siquiera ellos -la gente de a pie, insisto- daban en principio mayor importancia hasta que hemos venido a restreg¨¢rselo con esa absurda falta de sensibilidad, con esa in¨²til demostraci¨®n de prepotencia?-