El gato de Alicia
1. Llevamos tres a?os de p¨¢nico en las bolsas, y digo yo que ya podr¨ªamos habernos acostumbrado. A un cr¨ªo de cinco a?os le cuentas tres a?os seguidos el cuento de Caperucita y te env¨ªa a hacer g¨¢rgaras. A un inversor le cuentas durante tres a?os todas las ma?anas que la bolsa se est¨¢ hundiendo y le sigue dando p¨¢nico. Bueno. A lo mejor la soluci¨®n es dejar la bolsa en manos de los cr¨ªos de cinco a?os, como dec¨ªa Marx (Groucho).
2. Sostiene Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero que el Gobierno cae en el rid¨ªculo al calificarle como radical. 'Si llevo dos a?os pactando responsablemente', dice, riendo, '?qui¨¦n se va a creer que soy un radical?'. El argumento es bueno, pero tambi¨¦n vale al rev¨¦s. Despu¨¦s de dos a?os pactando responsablemente, ?qui¨¦n se va a creer su discurso de oposici¨®n frontal? A m¨ª, la verdad, me parece que eso no es muy importante, que lo importante es que no deje de sonre¨ªr y que siga con su lema 'Ternera, cerdo o pollo, lo importante es el buen rollo'. Una semana despu¨¦s del debate sobre el estado de la naci¨®n, no creo que nadie recuerde muy bien qu¨¦ propuso Zapatero. La verdad: no lo recuerdo ni yo, y eso que me dedico a esto. En cambio todo el mundo sabe que el debate lo gan¨® Zapatero, porque le sucede como al gato de Alicia en el Pa¨ªs de las Maravillas: pasado un tiempo, s¨®lo queda de ¨¦l una sonrisa. Poco, dir¨¢ cualquiera. Bueno, depende: si lo ¨²nico que ofrece su rival es mala sombra, una sonrisa puede ser mucho.
?No ¨¦ramos los favoritos? ?Si yo vi al presidente fumarse un puro con Bush! ?Sabe Mohamed VI que Aznar corre m¨¢s que Bush?
3. El caso del archivo de Salamanca: otro asunto solucionado por la v¨ªa del di¨¢logo. 'Este Gobierno ha dialogado hasta la extenuaci¨®n', dijo Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar antes de la huelga del 20 de junio pasado. A ver si va a ser eso: se extenu¨®, cogi¨® la p¨¢jara, y ya no le quedan fuerzas para dialogar m¨¢s. Ahora cualquier conflicto le parece el Tourmalet.
4. Honestamente, yo cre¨ªa que Espa?a pesaba m¨¢s que Marruecos en el coraz¨®n de EE UU, y Colin Powell ha tratado el conflicto de Perejil como se resuelve la pelea de dos cr¨ªos en el patio de la guarder¨ªa. '?Se?orita, Mohammed VI me ha quitado el Perejil!' '?Mentira! ?El Perejil era m¨ªo!'. Y llega la se?orita Colin Powell y obliga a Espa?a y a Marruecos a decir ante toda la clase que el Perejil no es de nadie. ?Pero no ¨¦ramos los favoritos? ?Si yo vi al presidente fumarse un puro con Bush! Y a ver otra cosa: ese Mohammed VI, ?cu¨¢nto corre? ?Sabe el rey de Marruecos que Aznar corre m¨¢s que Bush? Una idea: que Aznar desaf¨ªe a Mohammed VI a una carrera alrededor de Perejil y el que gane se la queda. ?Pero si acabamos de presidir Europa! Repaso unas declaraciones de Aznar de hace tres semanas: 'En Francia me imitan, en Italia dicen que me presente a las elecciones, en Alemania me aclaman... No estaremos tan mal'. ?C¨®mo puede ser que a un t¨ªo tan importante le traten igual que al rey de un pa¨ªs que...? Un momento. ?Fue hace cinco semanas o seis cuando Aznar propuso a todos los pa¨ªses europeos sancionar a Marruecos? La verdad: no s¨¦ c¨®mo alguien puede criticar una pol¨ªtica exterior mod¨¦lica como es la espa?ola.
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