Toros tr¨¢ilers de Las Ramblas

Sali¨® un quinto toro con 678 kilos, todo un tr¨¢iler, aunque no menos que el cuarto, que con 603 kilos ten¨ªa aspecto de m¨¢s gordinfl¨®n. Ese segundo toro del lote de El Califa, falto de raza, tom¨® la muleta a rega?adientes, siempre muy provocado con su matador. La faena de El Califa fue un conjunto de bulla popular, tan ligera como honesta. Todo eso, m¨¢s una voluntad de hierro, hasta que el tr¨¢iler de Las Ramblas cant¨® la gallina y se fue a las tablas. El Juli sali¨® a vaciarse en el sexto desde principio a fin. Estuvo muy variado con el capote, arriesg¨® en banderillas y mont¨® la muleta para irse al toro sin condiciones. Aunque el de Las Ramblas hab¨ªa gastado casi toda su energ¨ªa, la faena fue un quiero sobre todas las cosas, con actitud admirable aunque con el toro cada vez m¨¢s apagado. Un arrim¨®n el de El Juli.

De esa grande y gorda corrida de Las Ramblas, el segundo de la tarde, aunque manso en varas, fue el ¨²nico que tuvo transmisi¨®n en la muleta. Con ¨¦l apareci¨® un Califa con las ideas claras, firme y seguro. Una buena serie con la izquierda y los circulares finales firmaron una labor de signo valiente.

El toro de Gabriel Rojas, que abri¨® la corrida, no tuvo entrega, y Barrera rob¨® los muletazos dentro de una faena sobre todo autoritaria. El cuarto acab¨® por no soportar los kilos y apenas entr¨® en la muleta. El tercero, inofensivo de pitones, incomod¨® a un Juli que nunca acab¨® de ponerse a gusto en medio de una labor borrosa y de poca lucidez.