Una noticia seca y dura

Una vez saturado el mercado de los preparadores f¨ªsicos, ?por qu¨¦ no abrir el de los preparadores mentales? Me perd¨ª la presentaci¨®n del libro del preparador f¨ªsico de Aznar, pero ir¨ªa arrastr¨¢ndome a la de su preparador mental. Y es que, si uno no tiene por qu¨¦ saber qu¨¦ clase de ejercicios son buenos para desarrollar el tr¨ªceps, tambi¨¦n deber¨ªa dejarse guiar por un experto a la hora de mover el enc¨¦falo. No todo el mundo tiene la misma capacidad pulmonar o coronaria, pero tampoco la misma resistencia neuronal. Hay neuronas a las que viene mejor el aer¨®bic que los aparatos gimn¨¢sticos, o los cien metros lisos que los mil. Y las hay que soportan mayor cantidad de realidad que las de al lado. Si a una neurona capaz de digerir equis unidades de realidad le das equis m¨¢s una, puede sufrir una contractura que le haga in¨²til para vos y para m¨ª.

T¨² hablas en cualquier sitio de 'patrullas perimetrales' y pareces un experto en seguridad, o al menos en geometr¨ªa. Por eso decimos que hay que estar preparado mentalmente para distinguir el r¨¢bano de las hojas o el ruido de la furia.

Personalmente, hay d¨ªas en los que abro el peri¨®dico y llego al editorial con la lengua fuera. ?Significa eso que no lo he le¨ªdo con ritmo? ?Que deber¨ªa haberlo empezado por atr¨¢s? ?Que lo que le conviene a mi metabolismo es saltar de titular en titular sin entrar en detalles? Es que si entras en detalles te enteras, por ejemplo, de que la explosi¨®n fue 'seca y dura'. De hecho, la noticia tambi¨¦n fue seca y dura, porque uno hab¨ªa puesto el telediario para ver el Tiempo, que es la secci¨®n estrella del verano, y lo que menos esperaba era asistir al estallido de una informaci¨®n que llevaba dentro 50 kilos de dinamita. Si entras en detalles, averiguas que muri¨® una ni?a de seis a?os y un se?or que estaba esperando el autob¨²s, aunque en lugar de pasar el autob¨²s pas¨® el coche bomba. Si entras en detalles, te apercibes de que la casa cuartel (no se pierdan la contradicci¨®n en los t¨¦rminos) ten¨ªa menos medidas de seguridad que un chalet de clase media. Si entras en detalles, te informan, aunque no est¨¦s mentalmente preparado para ello, de que las instalaciones carec¨ªan de c¨¢maras de seguridad y de muro de protecci¨®n para atentados de este tipo. Si entras en detalles, comprendes que la ni?a asesinada viv¨ªa dentro de esa casa cuartel, lo que constituye una aberraci¨®n, porque o es cuartel o es casa. Si lo primero, no deber¨ªa haber ni?os de guardia; si lo segundo, no deber¨ªa vivir en ella un destacamento de la Guardia Civil.

Si entras en detalles, en fin, te haces cargo de que en el cuartel de Santa Pola un solo guardia se ocupa al mismo tiempo de las denuncias y de las transmisiones y de la seguridad. Te enteras de que, aunque en la calle no se puede aparcar, aparcar¨ªa hasta Bin Laden sin problemas, porque no hay guardias civiles suficientes para controlarlo (el presupuesto, imb¨¦cil, el presupuesto). De estos detalles te enteras por las mujeres de los guardias civiles que viven en esa aberraci¨®n arquitect¨®nica y social llamada casa cuartel. Pero, si acudes a las declaraciones del ministro Acebes, responsable de Interior, te quedas de piedra al leer que, en el momento de la explosi¨®n, el cuartel casa contaba con la 'guardia permanente y las patrullas perimetrales', lo que, sin significar nada, impresiona. T¨² hablas en cualquier sitio de patrullas perimetrales y pareces un experto en seguridad o al menos en geometr¨ªa. Por eso decimos que hay que estar preparado mentalmente para distinguir el r¨¢bano de las hojas o la furia del ruido.

Del mismo modo que no todos los d¨ªas puedes hacer diez mil metros en diez minutos, tampoco todas la ma?anas puedes leer el peri¨®dico y desayunar de forma simult¨¢nea, porque te caen mal el desayuno y la lectura y aparece la contractura encef¨¢lica. Y es que, si contin¨²as leyendo m¨¢s all¨¢ de lo aconsejable para tu resistencia neuronal, te encuentras a Otegi examinando el problema de la ni?a muerta a la luz de la ciencia. Otegi tiene un preparador mental inverso gracias al cual puede digerir cualquier atrocidad sin que se le corte la digesti¨®n. As¨ª, en lugar de apenarse por el descuartizamiento de la peque?a y del se?or mayor, analiza el suceso a la luz de la historia y deduce que la culpa es de las v¨ªctimas. ?No haber sido v¨ªctimas!, viene a decir esta lumbrera del pensamiento occidental a los 20 ni?os que ETA ha muerto o mutilado en los ¨²ltimos a?os. Si las fuerzas pol¨ªticas deciden finalmente ilegalizar a Batasuna, tengan la seguridad de que surgir¨¢ de nuevo, esta vez en forma de funeraria, para recoger los beneficios de lo que siembra. ?Alguien sabe de un buen preparador mental?