El FMI se juega su futuro en Brasil
Hay que olvidar la ret¨®rica de que las grandes operaciones financieras de rescate eran cosas del pasado. No eran mucho mayores que el pr¨¦stamo de 30.000 millones de d¨®lares (31.000 millones de euros) que el Fondo Monetario Internacional ha entregado a Brasil. Si esta operaci¨®n fracasa, no s¨®lo acabar¨¢ con la fr¨¢gil econom¨ªa brasile?a, sino tambi¨¦n con la raz¨®n de ser del FMI. (...)
El pr¨¦stamo del FMI ha proporcionado a Brasil la ¨²nica posibilidad de una salida feliz. Da al pa¨ªs la oportunidad de restablecer la confianza y de solucionar los problemas de solvencia del Gobierno. (...) Y el riesgo pol¨ªtico que puede surgir tras las elecciones de octubre se mitiga con un inteligente dise?o de la ayuda por parte del FMI. Aproximadamente el 80% del pr¨¦stamo se ha aplazado hasta el a?o 2003. (...) Si un candidato de la oposici¨®n gana la presidencia y se dedica a despilfarrar, el dinero no fluir¨¢. Pero el ¨¦xito no est¨¢ garantizado. La solvencia de Brasil est¨¢ en el filo de la navaja. Un crecimiento econ¨®mico lento continuado (...) o tasas de inter¨¦s m¨¢s altas pondr¨ªan a Brasil ante otra crisis de confianza con mucha facilidad.
Ominosamente, no hay que negar que hay intereses pol¨ªticos detr¨¢s de la decisi¨®n: el FMI quer¨ªa demostrar que todav¨ªa sirve para algo y la Administraci¨®n estadounidense estaba desesperada por reparar el da?o causado en la regi¨®n por la lengua suelta de O'Neill. Hay que conceder el beneficio de la duda al FMI y a Brasil. La econom¨ªa de Brasil es demasiado importante para que se le permita el colapso. El FMI ha hecho una jugada muy arriesgada.
Londres, 9 de agosto
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