El Gobierno argentino se declara insolvente tras la sentencia que anula el recorte salarial

Con el fallo de restituir el 13% de los salarios recortados en mayo de 2000 a los empleados y jubilados del Estado, el Supremo argentino inicia la embestida para obligar al Ejecutivo a presionar a los grupos parlamentarios peronistas para que desistan del juicio pol¨ªtico contra los nueve miembros del tribunal. La sentencia es inapelable y resuelve un caso particular. Si se extiende a toda la Administraci¨®n p¨²blica, aumenta en 200 millones de pesos (58 millones de euros) las n¨®minas de septiembre, y en 2.400 millones (686 millones de euros), el pr¨®ximo presupuesto.

El previsible aumento del d¨¦ficit fiscal altera las metas del borrador de la carta de intenci¨®n enviada al Fondo Monetario Internacional (FMI) y podr¨ªa demorar de nuevo el acuerdo que el Gobierno argentino esperaba firmar dentro de dos semanas. El Ejecutivo confiaba en que el fallo ser¨ªa favorable a sus intereses. La Corte ya hab¨ªa convalidado en el pasado las rebajas transitorias de los salarios de la Administraci¨®n p¨²blica en situaciones de emergencia econ¨®mica, pero el tribunal consider¨® esta vez que el recorte es 'inconstitucional', porque el aumento del coste de la vida desde que se devalu¨® el peso a comienzos de enero deprecia autom¨¢ticamente el valor de compra de los salarios y resulta 'irrazonable' que los empleados del Estado sufran, adem¨¢s, el recorte de sus salarios.

El conflicto de poderes permanece latente desde marzo, cuando una comisi¨®n del Congreso anunci¨® el juicio pol¨ªtico a los miembros del Supremo. Ayer se produjo una subida de tensi¨®n que estremeci¨® al Ejecutivo. 'Nadie sabe c¨®mo sigue esto. Plata no hay', admit¨ªa a EL PA?S un secretario de Estado. En rueda de prensa, el jefe de Gabinete, Alfredo Atanasof, dijo: 'El Poder Ejecutivo tiene que acatar los fallos de la Corte, pero todo el mundo sabe que el Estado no tiene los recursos necesarios para hacer frente a estos gastos'. El Ejecutivo va a demorar 'todo lo que pueda' la devoluci¨®n del dinero retenido por los decretos que en su momento dict¨® el Gobierno de la alianza de partidos que presid¨ªa Fernando de la R¨²a.

Restituci¨®n inmediata

El fallo de la Corte, votado a favor por siete de los nueve jueces, impone la restituci¨®n inmediata a un militar que inici¨® la demanda en los tribunales contra el Ministerio de Defensa del 13% desde el momento en que le rebajaron el salario. El expediente lleg¨® al Supremo por un recurso interpuesto por los abogados del Estado. La decisi¨®n habilita ahora a todos los empleados y jubilados de la Administraci¨®n p¨²blica a iniciar la misma reclamaci¨®n con la seguridad de que ganar¨¢n los juicios si el Ejecutivo no reconoce antes la deuda y se compromete a pagarla. La Ley de Presupuesto permite postergar la obligaci¨®n contra¨ªda en este ejercicio hasta 2004, tal vez con una emisi¨®n m¨¢s de t¨ªtulos, pero desde el pr¨®ximo mes los salarios tendr¨¢n que pagarse a los valores previos al recorte.

Seg¨²n el ministro de Justicia, Juan Jos¨¦ ?lvarez, 'los agentes del Estado comenzar¨¢n a litigar para que les devuelvan ese dinero retenido y el Estado nacional tendr¨¢ que hacer una cantidad de egresos [gastos] que no ten¨ªa previstos. El problema es de caja: si est¨¢ la plata, se reconoce el pago; si no, no se puede reconocer'.

La anunciada bomba es s¨®lo una de las que el Supremo tiene preparadas para las pr¨®ximas semanas si el Congreso no abandona definitivamente la ambici¨®n de continuar con el juicio pol¨ªtico. Ya no caben pactos ni acuerdos para que la batalla se salde con la renuncia de algunos miembros del tribunal. Un portavoz de la Corte recordaba ayer la consigna de los mosqueteros: 'Todos para uno, uno para todos'. De los temas a consideraci¨®n del Supremo y pendiente de resoluci¨®n se destacan en particular las demandas de los ahorradores, a los que se les impuso por decreto la pesificaci¨®n a 1,40 por d¨®lar de sus dep¨®sitos, que pretenden ahora recuperar su dinero en d¨®lares y tambi¨¦n los recursos de amparo para que los bancos restituyan los fondos confiscados a los ahorradores en los llamados corralito, las cuentas corrientes y de ahorro, y en el corral¨®n financiero que afecta a los dep¨®sitos a plazo. El ministro de Econom¨ªa, Roberto Lavagna, asegura: 'Si no se sella la fuga de dep¨®sitos a plazo, se corre el riesgo de acelerar una espiral inflacionaria que no tendr¨ªa fin'.