El TSJ anula la nueva zona l¨²dica del puerto de Guardamar del Segura

El controvertido proyecto para construir un complejo l¨²dico sobre 31.000 metros cuadrados de suelo junto al puerto deportivo de Guardamar del Segura no saldr¨¢ a la luz. El Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana ha resuelto 'anular los actos administrativos' por los que el Ayuntamiento, gobernado por el PP, aprob¨® el pliego de condiciones del concurso y su adjudicaci¨®n. En la sentencia el TSJ considera que dichos actos 'son contrarios a derecho' y estima las alegaciones que en su d¨ªa present¨® el PSPV.

Cuatro son las consideraciones que ha seguido el Tribunal Superior de Justicia para dictar un fallo favorable al recurso interpuesto por el PSPV: la indefenici¨®n del objeto del proyecto, la ausencia de una fianza acorde con la envergadura de este programa, la imprecisa clasificaci¨®n del contratista y la inexistencia de par¨¢metros urban¨ªsticos que permitan controlar el uso del suelo. Estas anomal¨ªas llevaron a los socialistas a alegar contra el pliego de condiciones del concurso y contra su posterior adjudicaci¨®n a la empresa Alfa Noray, pero ambas impugnaciones fueron desestimadas por el consistorio, en sendos plenos celebrados el 26 de enero de 1999 y el 28 de abril de 2000.

La pretensi¨®n del equipo de gobierno era reservar un terreno de 31.000 metros cuadrados del puerto deportivo para construir un complejo l¨²dico junto a la desembocadura del r¨ªo, pero la imprecisi¨®n del proyecto desat¨® las sospechas de la oposici¨®n.

El portavoz del PSPV, Manuel Aldeguer, vio en la escasa transparencia seguida por el consistorio un motivo para conjeturar que 'detr¨¢s pod¨ªa haber corruptelas e intereses ocultos, ya que no se indicaban las condiciones t¨¦cnicas ni las caracter¨ªsticas que tendr¨ªa ese complejo'. Esta ambig¨¹edad deriv¨® hacia un planteamiento urban¨ªstico que el PSPV tach¨® de 'pelotazo' ya que el Ayuntamiento efectuaba una concesi¨®n administrativa de ese terreno p¨²blico por un plazo de 75 a?os a cambio de una percepci¨®n econ¨®mica 'irrisoria': 1.322.000 euros, 120 millones de pesetas.

Seg¨²n consta en la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJ), la fianza que el Ayuntamiento le reclamaba a la empresa tambi¨¦n era claramente inferior a lo que estipula la ley. El consistorio se conformaba con 60.000 euros, unos diez millones de pesetas, en lugar de exigir a Alfa Noray el 4% del importe de la inversi¨®n prevista, que ascend¨ªa a 6.000 millones de pesetas, 36 millones de euros, y habr¨ªa supuesto unos ingresos de 1,4 millones de euros a las arcas municipales.

El proyecto, adem¨¢s, contradec¨ªa las consideraciones de la consejer¨ªa de Medio Ambiente, que el 23 de octubre de 1998 emit¨ªa un informe donde acotaba este espacio como 'suelo p¨²blico' destinado a 'equipamientos y dotaciones del puerto deportivo'. Esta clasificaci¨®n implicaba que s¨®lo se admitir¨ªan 'aquellas construcciones necesarias para el normal funcionamiento y explotaci¨®n del mismo'. Pese a ello el equipo de gobierno, del PP, admiti¨® el proyecto de una mercantil que planteaba edificar cuatro torres de apartamentos tur¨ªsicos con once plantas de altura cada uno de ellos.

El TSJ admite buena parte de estas irregularidades denunciadas por el PSPV y hace hincapi¨¦ en la nula claridad del pliego de condiciones a la hora de especificar en qu¨¦ consistir¨ªa el complejo l¨²dico previsto en ese espacio. Una imprecisi¨®n que, seg¨²n Aldeguer, 'les daba carta blanca para modificar a su antojo el proyecto y cambiar el uso del suelo con total impunidad'.

El PSPV aprecia adem¨¢s en la operaci¨®n urban¨ªstica ciertos aspectos turbios ligados a la concesi¨®n para explotar el astillero del puerto. Seg¨²n el portavoz socialista, Manuel Aldeguer, al concurso se presentaron dos mercantiles: Alfa Noray Internacional SL y Sport Asociados Guardamar SL. Sin embargo, inesperadamente, esta ¨²ltima empresa se retir¨® del concurso antes de que se procediera a la votaci¨®n de las plicas y poco despu¨¦s el administrador ¨²nico de esta compa?¨ªa, Farkhad Abbasov, recibi¨® la concesi¨®n para explotar el astillero del puerto. La concesi¨®n del astillero fue denunciada por otro constructor naval, Teodoro Moraga, quien asegur¨® que se cometieron numerosas irregularidades.