Las ruinas del socialismo

El cine internacional empieza a digerir lentamente el potencial cinematogr¨¢fico que encierra un acontecimiento hist¨®rico como el hundimiento de la Uni¨®n Sovi¨¦tica y el de todos los pa¨ªses del Este europeo. Un ejemplo de este inter¨¦s puede verse en el considerable n¨²mero de pel¨ªculas que bucean en la realidad del universo sovi¨¦tico o filosovi¨¦tico, antes y despu¨¦s de la ca¨ªda del Muro de Berl¨ªn. Una de ellas, K-19,dirigida por Kathryn Bigelow e interpretada por Harrison Ford y Liam Neeson, cuenta la odisea de un submarino nuclear sovi¨¦tico secreto que, a causa de una aver¨ªa, estuvo a punto de desencadenar una guerra nuclear entre Estados Unidos y la URSS en 1961. Al final, el peligro pudo ser conjurado gracias al hero¨ªsmo de la tripulaci¨®n.

Bigelow explic¨® ayer que su pel¨ªcula rinde tributo a aquellos h¨¦roes cuya gesta 'merece ser conocida internacionalmente'. A su lado, tan espectaculares en persona como en la pantalla, Ford y Neeson se descubrieron no menos entusiastas de un filme que contribuye a arrinconar el clich¨¦ del 'enemigo comunista'. 'Estoy muy orgulloso de haber participado en esta pel¨ªcula', dijo Harrison Ford, que ha llegado a Venecia acompa?ado por su nueva compa?era Calista Flokhard. 'Nunca pens¨¦ que fuera a ser un ¨¦xito de taquilla, porque no era ¨¦se el objetivo', a?adi¨®.

Liljia 4-ever, del director sueco Lukas Moodyson, habla tambi¨¦n de h¨¦roes rusos, aunque sin uniforme y con un final mucho m¨¢s tr¨¢gico. H¨¦roes de 12 y de 16 a?os obligados a sobrevivir en un territorio sin ley, sin espina dorsal social, sin familia y sin apoyos de ninguna clase. La pel¨ªcula de Moodyson es el alegato moral m¨¢s duro contra la sociedad capitalista que se ha visto en la Mostra, porque plantea con enorme crudeza el colapso de la Uni¨®n Sovi¨¦tica y el horror que se ha derivado de ¨¦l, siguiendo el hilo de un negocio, la 'trata de blancas', en el que la ex URSS aporta la materia prima, y los pa¨ªses ricos, como la propia Suecia, son los socios importadores y los gestores del tinglado.

El panorama de la Alemania del Este en los a?os previos a la ca¨ªda del Muro que presenta F¨¹hrer ex, del alem¨¢n Winfried Bonengel, no es menos desolador. El director llega incluso a insinuar que el movimiento neonazi se gest¨® como una respuesta a la opresi¨®n comunista. La p¨¦rdida de la cohesi¨®n social, el abandono y el desastre que siguieron al derrumbamiento de la URSS aparecen retratados tambi¨¦n en la pel¨ªcula de Andrej Konchalovski

La casa de los locos. Esta vez a trav¨¦s de una enferma mental encerrada en un psiqui¨¢trico pr¨®ximo a la frontera entre Rusia y Chechenia, en 1996.