Un soberano con muchas tablas

'Es para m¨ª motivo de honda satisfacci¨®n estar una vez m¨¢s con vosotros en estas fechas tan se?aladas'. El personaje alto y de incuestionable majestad que pronunciaba ayer estas palabras en el Port Ol¨ªmpic de Barcelona no era, pese a su apariencia y elocuencia, quien parec¨ªa ser, sino el c¨®mico y mimo Toni Alb¨¤, bien conocido por la polvareda que levantaron la pasada temporada sus imitaciones del rey Juan Carlos en TV-3. Ahora, el actor regresa caracterizado como el monarca con todo un espect¨¢culo teatral, que se representar¨¢ en el teatro Condal a partir del d¨ªa 10. Bajo el t¨ªtulo de Els bufons del regne y acompa?ado por el grupo teatral Trotam, Alb¨¤ leer¨¢ fragmentos de su diario real ('Devolver Forrest Gump al videoclub. No me ha gustado'), ofrecer¨¢ un parlamento regio, dar¨¢ audiencia y responder¨¢ a las preguntas que le formulen los espectadores, siempre desde su papel de soberano.

Alb¨¤, que dijo ayer que el maquillaje para su transfiguraci¨®n requiere una hora y media de tiempo, utiliza adem¨¢s unos altos coturnos a fin de dar la talla. El actor afirm¨® que ha recibido comentarios de gente pr¨®xima a miembros de la Familia Real en el sentido de que la parodia gusta a ¨¦sta. En la presentaci¨®n del montaje en el puerto, mientras a la vista se desarrollaba, oportunamente, una regata, Alb¨¤ apareci¨® impecablemente trajeado, con americana cruzada y rodeado de individuos con aspecto de cuerpo de seguridad que procedieron a registrar, con cierta fruici¨®n, a los periodistas convocados. Agitando la mano de manera reconocible, Alb¨¤ pos¨® ante los fot¨®grafos ('os parec¨¦is a los de Mallorca', les dijo). Uno de ellos qued¨® tan convencido de la imagen del actor que reclam¨® su atenci¨®n para la foto con un 'aqu¨ª, majestad'.

El propio Daniel Mart¨ªnez, director general de Focus, que coproduce el espect¨¢culo, recalc¨® lo 'excepcional de contar con su majestad', y se?al¨®: 'Su figura engrandece nuestro teatro'. A lo que Alb¨¢ contest¨® con un cari?oso 'bueno, qu¨¦ cachondo, Daniel, ah, ah, ah', antes de expresar su felicidad por estar en Barcelona, 'en esta regi¨®n adosada, aut¨®noma, quiz¨¢ demasiado aut¨®noma que es Catalu?a'.

Siguiendo con la parodia, Alb¨¤ dijo: 'Agradezco la acogida que siempre nos dispensa Catalu?a a m¨ª y a mi familia, mi esposa, mi hijo, las dos infantas, la de naranja y la de lim¨®n, y mis primos, y los primos de mis primos que tambi¨¦n son primos m¨ªos', y agradeci¨® asimismo 'a todos esos primos que contribuyen a que pasemos las vacaciones en Mallorca'.

La parodia de Alb¨¤ es en general m¨¢s o menos amable, pero el actor afirma: 'No dejar¨¦ de contestar a preguntas heavy que se me hagan desde el p¨²blico, como qu¨¦ pienso de Batasuna' o a cuestiones m¨¢s personales.

Del objeto de su parodia recalc¨® que ¨¦l no dice nunca que se trate del rey de Espa?a. 'Me muevo siempre en el terreno de lo que la gente supone que soy, sin afirmarlo yo nunca. La bandera que muestro se parece pero no lo es, y no se menciona el pa¨ªs; nos hemos asesorado con abogados conscientes de que la Casa Real no se meter¨¢ con nosotros pero nos han dicho que tenemos que ir con cuidado con los mecanismos jur¨ªdicos que puede poner en marcha cualquier ciudadano. Se trata de ir sorteando, esquivando, esquiando, como en Baqueira'. Hambriento, pues 'la diferencia horaria con Madrid, ya se sabe, seis horas', el supuesto monarca se sent¨® a comer no sin antes lanzar un sentido: 'Viva la Rep¨²blica... argentina'.