Mosc¨² se asfixia
M¨¢s de 200 incendios forestales cercan la ciudad y causan una niebla t¨®xica
Las personas que ayer por la ma?ana deb¨ªan aterrizar en Mosc¨² y San Petersburgo se llevaron una desagradable sorpresa: los aeropuertos de las dos principales ciudades rusas estaban cerrados. El motivo fue que el denso humo de los incendios forestales que se prolongan desde hace dos meses hab¨ªa envuelto ambas urbes, donde la visibilidad era sumamente escasa.
La inmensa mayor¨ªa de los moscovitas se despertaron con una picaz¨®n en la garganta y el sabor a hoguera. Y al acercarse a las ventanas de sus pisos se horrorizaron: s¨®lo ve¨ªan humo. Nunca antes los incendios que se prolongan desde hace dos meses hab¨ªan provocado una niebla tan densa como la de ayer. El humo se filtraba por las ventanas a los apartamentos, llegaba a los pasos subterr¨¢neos y se met¨ªa en las estaciones de metro. Nada ni nadie se escapaba de la niebla t¨®xica provocada por los casi 200 incendios que cercan Mosc¨².
Los yacimientos de turba, que propagan las llamas bajo tierra, dificultan la labor de los bomberos
La visibilidad en la capital apenas superaba los 50 metros ayer por la ma?ana. Las torres y estrellas del Kremlin pr¨¢cticamente no se ve¨ªan tras la espesa cortina de humo, y los ojos de los transe¨²ntes comenzaban a lagrimear a los pocos minutos de caminar por el centro de Mosc¨². Algunos trataban de aliviarse con mascarillas o pa?uelos h¨²medos mientras cortaban a su paso la fantasmag¨®rica neblina azulada.
Alexandr Yelis¨¦yev, jefe de la oficina capitalina de defensa ciudadana y situaciones de emergencia, tuvo que pedir a la poblaci¨®n que no se dejara llevar por el p¨¢nico y dar recomendaciones para disminuir los efectos del humo que ha envuelto a Mosc¨². Los m¨¦dicos aparecieron en las televisiones y las radios aconsejando cerrar las ventanas y colgar de ellas s¨¢banas h¨²medas. A las mujeres embarazadas y a las madres con ni?os peque?os les recomendaron quedarse en casa, y de ser posible, abandonar Mosc¨².
El alcalde capitalino, Yuri Luzhkov, adem¨¢s de pedir calma a la poblaci¨®n, orden¨® a los camiones de riego lanzar agua en las calles para tratar de hacer m¨¢s soportable la atm¨®sfera que se respira en Mosc¨².
La situaci¨®n se deterior¨® sustancialmente ayer, ya que, como explic¨® Alex¨¦i Li¨¢jov, director general de la Oficina de Hidrometeorolog¨ªa de la ciudad y provincia de Mosc¨², en la atm¨®sfera se form¨® una capa de contenci¨®n que contribuye a la concentraci¨®n de las sustancias t¨®xicas en la superficie de la tierra. Y la falta de viento impide que la niebla se vaya de Mosc¨².
Las concentraciones de mon¨®xido de carbono superaban en tres veces la norma y otro tanto ocurr¨ªa con las de bi¨®xido de nitr¨®geno y muchos otros gases t¨®xicos, lo que, unido al humo, influye negativamente en las personas que sufren de asma, alergias y enfermedades card¨ªacas.
M¨¢s de 4.000 efectivos ha movilizado el Ministerio de Situaciones de Emergencia para combatir los incendios forestales en los alrededores de Mosc¨². Pero, por el momento, los elementos est¨¢n ganando la batalla a los hombres: en las ¨²ltimas 24 horas surgieron 93 nuevos focos de incendios y la superficie de ¨¦stos aument¨® en m¨¢s de 200 hect¨¢reas. En total, en la provincia de Mosc¨² hab¨ªa ayer 188 incendios que cubr¨ªan una superficie de 549 hect¨¢reas. El principal problema es que, adem¨¢s de arder los bosques, est¨¢n ardiendo los yacimientos de turba, combustible natural que tiene la mala costumbre de incendiarse subterr¨¢neamente. El foco puede llegar hasta a diez metros de profundidad y propagarse bajo tierra. Esto dificulta much¨ªsimo los trabajos para apagar las llamas y siempre existe el peligro mortal de que la tierra, simplemente, se abra bajo los pies de los bomberos y ¨¦stos desaparezcan en el infierno que arde bajo la superficie.
La situaci¨®n m¨¢s cr¨ªtica se ha producido en los distritos de Dm¨ªtrov, en el norte de la provincia de Mosc¨², y en el de Shatura, al este, donde arden dos grandes turberas que abarcan m¨¢s de 100 hect¨¢reas.
Aunque la niebla puede durar tres o cuatro d¨ªas m¨¢s, en ning¨²n caso motivar¨¢ el aplazamiento del partido de f¨²tbol que ma?ana, en el estadio Lokomotiv, deber¨¢n jugar Rusia e Irlanda en el marco de la Copa de la Europa. As¨ª al menos lo afirm¨® ayer Andr¨¦i Tarabrin, portavoz de la Uni¨®n de F¨²tbol de Rusia mientras las autoridades recomendaban suspender las clases de gimnasia y deportes y permit¨ªan a los ni?os faltar a clases si los padres decid¨ªan llev¨¢rselos fuera de Mosc¨².
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