Horror al vac¨ªo en el Depor

Nadie estaba muy dispuesto, en la medianoche del martes, a reconocer el horror al vac¨ªo de Valer¨®n que se hab¨ªa apoderado del Deportivo. El Milan acababa de arrasar en Riazor (0-4), y al entrenador, Javier Irureta, le pesaban m¨¢s las ganas de evitar que la psicosis paralice al equipo que el inter¨¦s en analizar el partido: 'No hemos perdido por la ausencia de Valer¨®n. Contra el Betis estaba ¨¦l y tambi¨¦n nos metieron cuatro'. En eso apareci¨® Mauro Silva, la voz de la conciencia, el ¨²nico futbolista dispuesto a dar la cara por la derrota, y dej¨® las cosas claras: 'Nos ha faltado la pausa en el juego que pon¨ªa Valer¨®n'.

Tampoco Sergio, al que le toc¨® la papeleta de sustituir lo insustituible, se anduvo por las ramas ayer, ya con m¨¢s tiempo para digerir el correctivo. 'Yo no voy a jugar nunca como Valer¨®n, que es el mejor media punta nacional', confes¨®. '?l representaba un alivio, una salida en los momentos dif¨ªciles'. Sergio, habitual medio centro, admiti¨® su incomodidad en la posici¨®n que ocup¨® frente al Milan, pero est¨¢ dispuesto a seguir intent¨¢ndolo.

Otra cosa es que Irureta persevere con esa soluci¨®n, que ha salido muy tocada tras la debacle. ?Por qu¨¦ prefiri¨® Irureta adelantar a Sergio a la media punta antes que alinear a dos delanteros? Los m¨¢s cr¨ªticos con el t¨¦cnico lo atribuyen a su reflejo conservador y a su nostalgia por los tiempos en que sol¨ªa jugar con tres medio centros, el c¨¦lebre trivote. Contra el Milan, Irureta no invent¨® nada nuevo, porque no era la primera vez que Sergio ocupaba esa posici¨®n. Claro que siempre lo hab¨ªa hecho por un cambio a mitad de un partido y con el marcador favorable.

En la decisi¨®n de Irureta influy¨® decisivamente el precario estado f¨ªsico de Trist¨¢n, cuya situaci¨®n ha dado un vuelco en una semana. Hace siete d¨ªas, la racha de Makaay parec¨ªa condenarlo a una larga espera en el banquillo. La lesi¨®n de su admirado Valer¨®n puede convertirlo en un hombre b¨¢sico. Irureta est¨¢ convencido de que si juega con dos puntas, uno de ellos debe retrasarse un poco para asociarse al juego del equipo y enlazar con el medio del campo. S¨®lo Trist¨¢n puede hacerlo. Makaay y Luque son especies de ¨¢rea, y alinearlos juntos abocar¨ªa al equipo a cambiar de estilo con un f¨²tbol m¨¢s directo.

Probablemente el jugador con caracter¨ªsticas m¨¢s parecidas a las de Valer¨®n -por pase y visi¨®n de juego- es Fran. Hay elementos que avalan esa soluci¨®n: ya conoce ese puesto y, de hecho, el declive f¨ªsico de la edad (33 a?os) le empuja cada vez m¨¢s a abandonar la banda para irse al centro. Pero le cuesta acabar los partidos. Y el hueco que dejar¨ªa en la izquierda no resulta f¨¢cil de cubrir: Amavisca est¨¢ lesionado y a Irureta no parece convencerle demasiado la alternativa de Luque, que ha jugado ah¨ª alguna vez con el Mallorca y con la selecci¨®n sub 21 . El dilema est¨¢ sobre la mesa. De superar ese horror al vac¨ªo depende ahora la suerte del Depor.