La 're-escolarizaci¨®n' de Mar¨ªa

Soy un padre novato en asuntos de escolarizaci¨®n, pero los acontecimientos referidos a la de mi hija, Mar¨ªa, me han hecho comprender la situaci¨®n que muchos otros padres atraviesan.

Mar¨ªa se escolariza a los dos a?os, para ello tuvo que esperar a que se produjeran vacantes 'de pago'. Continu¨® a los tres a?os en el mismo centro pero, por el programa de escolarizaci¨®n de la Consejer¨ªa de Educaci¨®n, dicho centro pas¨® a ser concertado (Educaci¨®n Infantil, 2? ciclo) para los cuatro a?os; con lo que entramos en el sorteo de plazas. No result¨® afortunada, junto con 23 ni?os m¨¢s.

Solicito, mediante el anexo 23, nuevo puesto escolar para alumnos no admitidos en el centro solicitado, presentando en la misma fecha escrito dirigido a la delegada provincial de Educaci¨®n en Sevilla; donde incido, entre otras cosas, en la escolarizaci¨®n de Mar¨ªa en un centro pr¨®ximo a su domicilio, por razones obvias.

Desestimado ¨¦ste sin resolver el fondo del asunto, la escolarizaci¨®n. Da como ¨²nica salida el recurso contencioso-administrativo, de ah¨ª el uso de esta tribuna. Del anexo 23 a¨²n no he recibido contestaci¨®n.

Tanto telef¨®nica como personalmente me pongo en contacto con funcionarios de la delegaci¨®n provincial para exponer el derecho que me asiste en que me oferten puestos para la 're-escolarizaci¨®n' de Mar¨ªa. ?nicamente me ofrecen un centro p¨²blico que se encuentra a unos 2,5 kil¨®metros de mi domicilio. Curiosamente, baremado con cero puntos que por residencia le corresponden. Ahora ya no hay zonas.

Se podr¨¢ alegar la no-obligatoriedad de la escolarizaci¨®n a esas edades, pero esa misma no obligatoriedad la desplaz¨® del centro escolar donde estaba. Al no existir centro p¨²blico, ni concertado pr¨®ximo, asumiremos de nuevo los costes de escolarizaci¨®n en un centro privado.

No termina aqu¨ª tu escolarizaci¨®n. Dentro de dos a?os, Mar¨ªa, entrar¨¢s en un nuevo sorteo de escolarizaci¨®n, ya obligatoria, y posiblemente deber¨¢s cambiar de centro escolar otra vez. C¨®mo explic¨¢rtelo. ?S¨®lo nos queda desearte suerte?