La polic¨ªa busca al 'asesino del rifle' en Virginia tras el disparo a una nueva v¨ªctima
Ingresado en estado cr¨ªtico un hombre de 37 a?os tras recibir un tiro
Los elementos son los mismos -un disparo desde la distancia en un aparcamiento contra una v¨ªctima escogida al azar-, aunque falta la confirmaci¨®n definitiva. La polic¨ªa no tiene todav¨ªa la bala que alguien dispar¨® en la noche del s¨¢bado contra un hombre de 37 a?os en Ashland, un pueblo de Virginia a casi 150 kil¨®metros de Washington. La bala est¨¢ todav¨ªa en el abdomen del individuo, ingresado en estado cr¨ªtico en un hospital de la zona.
Si el examen bal¨ªstico lo confirma, ser¨ªa la primera aparici¨®n del asesino desde el lunes de la semana pasada y la primera vez que act¨²a en fin de semana. El hombre herido en la madrugada espa?ola del domingo viajaba con su mujer camino de Washington. Pararon a cenar en un restaurante mexicano. A la salida, cuando se dirig¨ªan hacia el coche, escucharon un ruido que la mujer atribuy¨® a un pinchazo de alg¨²n coche. Su marido dio tres pasos m¨¢s y se desplom¨® en el suelo.
El suceso ocurri¨® a las ocho y media de la tarde; a las nueve, el individuo estaba ya en la mesa del quir¨®fano en el que fue intervenido durante tres horas por una herida de bala en el abdomen que ha provocado da?os a varios ¨®rganos vitales. Una portavoz del centro m¨¦dico de Richmond en el que est¨¢ ingresado dijo ayer que el herido se mantiene en estado cr¨ªtico. Est¨¢ sedado, pero consciente, lo que proporciona cierto optimismo sobre su evoluci¨®n a la espera de que supere las pr¨®ximas horas.
Los m¨¦dicos no pudieron acceder al lugar en el que tiene incrustada la bala que casi le cost¨® la vida. Varios cirujanos esperaban anoche a que se estabilizaran sus constantes vitales para realizar una segunda intervenci¨®n en la que intentar¨ªan extraer el proyectil.
Sin disponer de la bala y sin haber encontrado el casquillo, la polic¨ªa no pod¨ªa aventurarse a atribuir el suceso al asesino de Washington que ha provocado hasta el momento nueve v¨ªctimas mortales y dos heridos graves. Seg¨²n Stuart Cook, jefe del departamento de polic¨ªa del condado, 'vamos a actuar como si fuera obra del francotirador hasta que no se demuestre lo contrario'. Cook reconoci¨® que la falta de pruebas bal¨ªsticas o testigos puede retrasar la confirmaci¨®n.
Caracter¨ªsticas comunes
Hay m¨²ltiples caracter¨ªsticas comunes con casos anteriores. Varios testigos aseguran que no hubo disputas ni peleas en el restaurante, lo que descarta que pudiera tratarse de un ajuste de cuentas barriobajero. Afirman que el sonido del disparo proced¨ªa de una zona boscosa escondida en la oscuridad detr¨¢s del restaurante. Y no parece coincidencia que el establecimiento est¨¦ situado justo al borde de la principal autopista del Estado de Virginia, la I-95.
No hay, sin embargo, ning¨²n testimonio sobre el sospechoso o sobre el veh¨ªculo que emple¨® en la huida. La polic¨ªa bloque¨® la carretera en varias de las salidas con la esperanza de localizar la famosa furgoneta que muchas personas dicen haber visto salir de manera apresurada en cr¨ªmenes anteriores. Los controles no s¨®lo provocaron un caos de tr¨¢fico en un radio de decenas de kil¨®metros; para ahorrar tiempo y evitar sorpresas, algunos polic¨ªas obligaban directamente a todos los conductores de furgonetas blancas a tirarse al suelo con las manos en la espalda.
Si el crimen es finalmente atribuido al asesino del Tarot, ser¨ªa su aparici¨®n n¨²mero 12, aunque la polic¨ªa investiga al menos un caso m¨¢s ocurrido el mes pasado con muchos elementos comunes a la manera de actuar del autor de los disparos. Este disparo en fin de semana agranda a¨²n m¨¢s la investigaci¨®n; la polic¨ªa sospechaba que el asesino s¨®lo act¨²aba por la ma?ana y por la noche de lunes a viernes porque quiz¨¢ empleaba un veh¨ªculo de su empresa. El crimen del s¨¢bado ampl¨ªa el abanico de hip¨®tesis que se analizan.
Sin rastro de la furgoneta blanca
La polic¨ªa de Washington va a confirmar hoy que la ¨²nica pista que hab¨ªa proporcionado una cierta esperanza en el caso a lo largo del fin de semana es en realidad inservible. Un trabajador de una empresa de alquiler de furgonetas y camiones encontr¨® un casquillo de bala en un veh¨ªculo similar al que busca la polic¨ªa. No se trata en este caso de la famosa furgoneta blanca con barras para colocar escaleras en el techo, sino del cami¨®n peque?o que varios testigos vieron alejarse de las escenas de los cr¨ªmenes cometidos en la noche del 3 de octubre. Cuando el operario avis¨® a la polic¨ªa, se mont¨® un despliegue de forenses y analistas para tratar de determinar si ¨¦se era, quiz¨¢, el veh¨ªculo empleado por el asesino en alguno de los cr¨ªmenes. Aunque hasta hoy no se van a hacer p¨²blicos los resultados de los an¨¢lisis, fuentes policiales han filtrado que el casquillo corresponde a una bala de calibre distinto a las que emplea el asesino. Ese tipo de bala no puede tampoco emplearse en ninguno de los rifles o fusiles que sirven para disparar las balas del calibre empleadas en los cr¨ªmenes del asesino de Washington.
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