'Tirano Banderas', de Valle-Incl¨¢n
La genial novela sobre una dictadura latinoamericana, en la colecci¨®n de EL PA?S
'El sentido tr¨¢gico de la vida espa?ola s¨®lo puede expresarse con una est¨¦tica sistem¨¢ticamente deformada', as¨ª explicaba su autor la bondad del esperpento como estilo narrativo en su drama, y sin duda su obra maestra, Luces de bohemia, de 1924. Corren tiempos en los que, dentro de la tribu literaria, se discute sobre la conveniencia, o no, de esa evidente tendencia a diluir las yas de por si difusas fronteras entre la realidad y la ficci¨®n. Pues bien, en la vida de Valle esa sutil separaci¨®n es completa y voluntariamente inexistente. Frente al rigor barojiano, por ejemplo, Valle representa el desd¨¦n por la precisi¨®n. Son formas distintas de contemplar y narrar el mundo que les rodea, que adem¨¢s, en el caso del escritor gallego, le impulsa a utilizar un lenguaje riqu¨ªsimo con el que describir un mundo fant¨¢stico e imaginativo. Naturalmente, alguien que manifiesta una voluntad de aventuras y viajes infrecuente, que es encarcelado o nombrado director de la Academia Espa?ola en Roma casi sin soluci¨®n de continuidad, y, siempre en el borde la miseria econ¨®mica, ten¨ªa que encontrar en las muy frecuentes tertulias de Caf¨¦ uno de sus espacios naturales de convivencia. Valle se empapa de la vida y cultura callejera y la convierte a sus gentes en protagonista de sus obras. En 1926 publica Tirano Banderas, una de sus mejores novelas, que podr¨¢ comprar ma?ana el lector de EL PA?S por tres euros, una visi¨®n personal y esperp¨¦ntica de una dictadura latinoamericana en la que, una vez m¨¢s, realidad y ficci¨®n resultan indivisibles.
Ni curas ni oligarcas
En 1921, la revoluci¨®n mexicana ha triunfado y el presidente ?lvaro Obreg¨®n, martillo de curas que acabar¨¢ sus d¨ªas asesinado por un fan¨¢tico cat¨®lico, invita al escritor a visitar M¨¦xico. La excusa es conmemorar el centenario de la independencia del pa¨ªs, pero Obreg¨®n, manco como Valle-Incl¨¢n, quiere que el autor gallego lidere la respuesta contra las presiones de la monarqu¨ªa espa?ola, que exige compensaciones econ¨®micas por los bienes expropiados a los espa?oles durante la revoluci¨®n. Valle-Incl¨¢n recorre el pa¨ªs en un vag¨®n de tren cedido por el presidente y concede entrevistas en las que hostiga a los colonos espa?oles. Su postura, cada vez m¨¢s socializante, se radicaliza al regresar a Espa?a. En 1926 aparece Tirano Banderas: el antiguo carlista arremete ahora contra la tradici¨®n y los privilegiados.
Babelia
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