Moles gran¨ªticas en la pampa h¨²meda

AVANZAMOS HACIA el extremo del precipicio con la vista fijamente clavada en la piedra El Centinela: nos asimos a ¨¦l con la mirada para no desbarrancarnos por esas rocas prec¨¢mbricas redondeadas, antiqu¨ªsimas. Estamos en el coraz¨®n de la sierra de Tandil, provincia de Buenos Aires (Argentina). A cinco kil¨®metros de aqu¨ª nos aguarda la Piedra Movediza, cuyo nombre proviene de una mole gran¨ªtica que oscilaba en equilibrio hasta el 29 de febrero de 1912, d¨ªa en que se desplom¨®, para horror de los habitantes del pueblo, que, si bien no sufrieron da?os personales, quedaron desprovistos de la gran atracci¨®n tur¨ªstica de su ¨¦poca.

A 350 kil¨®metros de la capital del pa¨ªs, Tandil se asienta pl¨¢cidamente en el coraz¨®n de la pampa h¨²meda. Sus habitantes se ven poco afectados por la crisis que asuela al pa¨ªs. Tandil nutre y se nutre de productos agr¨ªcolas de primer¨ªsima calidad, carne de vacuno, cereales y especialidades como embutidos, quesos y dulces. Y est¨¢ sobre la falda de la que Darwin denomin¨® 'la serran¨ªa m¨¢s antigua del planeta'.

La traves¨ªa de la pampa permanece id¨¦ntica a la que se ofreciera a los viajeros del siglo XIX, cuando desde Buenos Aires part¨ªan hacia el fuerte Independencia (luego llamado Tandil, su nombre en mapuche) en carretas y diligencias que luego regresaban a la capital cargadas de plumas de avestruz y cueros de vaca para ser exportados. La actual carretera sigue, como anta?o, el cauce del r¨ªo Salado; igual que entonces, casi siempre desbordado. Tomamos el aperitivo en ?poca de Quesos, en una esquina sin ochava que fue la Posta del Centro y que sigue ofreciendo al visitante un mostrador hospitalario donde saborear tablas de quesos, embutidos, vinos y exquisitos alfajores. La mejor parrilla de Tandil se llama Al Ver Ver¨¢s, lugar que ya hab¨ªa conocido en una escapada adolescente y cuyo asado record¨¦ todos estos a?os... ?hay que volver a las fuentes!