Residencia de Colmenar

En referencia al art¨ªculo aparecido el pasado 3 sobre la adjudicaci¨®n de la residencia de Colmenar de Oreja, me gustar¨ªa aclarar varios aspectos. En primer lugar, quiero se?alar que despu¨¦s de casi diez a?os de gestiones infructuosas por parte de la anterior alcalde, el equipo de gobierno que presido ha sido capaz de hacer realidad en una legislatura la construcci¨®n de una residencia p¨²blica para disminuidos, un hecho por el que nuestro pueblo puede estar de enhorabuena.

Asimismo, me gustar¨ªa recordar que la adjudicaci¨®n de la gesti¨®n de la residencia se ha realizado conforme a los criterios de un concurso p¨²blico, por lo que, adem¨¢s de haber seguido un proceso transparente, en esta concesi¨®n ha primado el inter¨¦s p¨²blico frente a cualquier otro inter¨¦s.

Por ello quiero se?alar que la construcci¨®n de una residencia p¨²blica para los hijos de los afiliados de una asociaci¨®n -tal y como se?ala en su art¨ªculo pretend¨ªan los responsables de Afandice- no responde a los criterios de igualdad que deben primar en la gesti¨®n de una residencia de titularidad p¨²blica. Es m¨¢s, la adjudicaci¨®n de las plazas de esta residencia corresponden a la Comunidad, quien con criterios sociales y terap¨¦uticos debe adjudicar sus plazas.

Si bien Afandice asegura haber realizado un gran esfuerzo desde hace varios a?os, esta circunstancia no puede nunca valorarse m¨¢s all¨¢ de lo estipulado en el propio concurso, porque ser¨ªa incurrir en una clara irregularidad.

Por ¨²ltimo, me gustar¨ªa agradecer los esfuerzos realizados por todas las personas e instituciones que han hecho posible la culminaci¨®n de este proyecto, en especial a Afandice, para contribuir a la construcci¨®n de la residencia p¨²blica que servir¨¢ para mejorar la calidad de vida tanto de sus asociados como la de todas las personas que con un criterio objetivo acrediten que necesitan sus servicios.