Riefenstahl
Aunque usted no est¨¦ de acuerdo, las -como usted dice en su cr¨®nica- tersas im¨¢genes de Olimpia y El triunfo de la voluntad s¨ª son culpables de miles de horrores. Fue precisamente su buen hacer como cineasta el que contribuy¨® al fortalecimiento del r¨¦gimen nazi. La responsabilidad de Leni Riefenstahl reside en que el gran poder de sus im¨¢genes estuvo al servicio del monstruoso sistema al que aliment¨® y del que se benefici¨®.
Son im¨¢genes magn¨ªficas y poderosas, cuya propia elocuencia las hace culpables de crimen ideol¨®gico, que es como algunos llaman al aporte propagand¨ªstico a favor de un sistema pol¨ªtico criminal. Leni fue -probablemente a¨²n hoy lo sea- una nazi que apreciaba la belleza y que hizo bien su trabajo. Tambi¨¦n el doctor Mengele apreciaba la belleza (silbaba a Puccini mientras manipulaba, sin anestesia, ¨®rganos vitales de ni?os gemelos con los que experimentaba) y realiz¨® muy bien su trabajo. Yo tambi¨¦n protesto por la presencia de esta mujer en Sevilla, no vale la pena crear simpat¨ªas en relaci¨®n a este tipo de artistas.
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