Respeto a la independencia
En los ¨²ltimos d¨ªas hemos tenido ocasi¨®n de asistir a la controversia desatada por la excarcelaci¨®n de un preso etarra por parte de la juez Ruth Alonso. A pesar de que el Consejo General del Poder Judicial ha reconocido que la actuaci¨®n de dicha juez cae dentro del normal ejercicio de sus funciones jurisdiccionales, -lo que no significa que otra instancia judicial superior no pueda modificarla-, desde Gesto por la Paz nos gustar¨ªa hacer hincapi¨¦ en dos cuestiones que nos parecen especialmente muy importantes.
En primer lugar, esta organizaci¨®n pacifista quiere pedir un poco de serenidad y mesura a todas aquellas personas que participan del poder medi¨¢tico.
Sabemos que la mayor¨ªa de los temas que afectan a las v¨ªctimas de delitos graves, como son los de terrorismo, pueden herir sensibilidades que han de cuidarse, pero ni pol¨ªtica, ni social, ni humanamente merece esta juez las barbaridades que se le dedicaron durante varios d¨ªas en muchas tertulias y en varios art¨ªculos de distintos peri¨®dicos de toda Espa?a.
S¨®lo si desarmamos nuestras palabras de excesivas cargas emocionales que las encienden, nuestro discurso se escuchar¨¢ un poco m¨¢s que lo que dura el cabreo o calent¨®n del momento. Adem¨¢s, a veces, si nos frenamos, si nos paramos un poco y no nos lanzamos a la caza de la pr¨®xima pieza con tanta ansiedad, es posible que nos equivoquemos menos.
Y, en segundo lugar, desde Gesto por la Paz deseamos insistir en que el Estado de Derecho se fundamenta en la separaci¨®n de los poderes ejecutivo, legislativo y judicial; esto es, en su independencia. Y, precisamente, en los ¨²ltimos tiempos est¨¢n ocurriendo una serie de hechos y se escuchan determinados posicionamientos que ponen en duda si en Espa?a no se llega a conculcar esa independencia del poder judicial en casos como el que nos ocupa.
Una democracia sana no puede permitir que, porque una decisi¨®n judicial que no sea del gusto del Gobierno, altos cargos del ejecutivo lancen feroces cr¨ªticas y se alimente la duda que se aliment¨® desde estas instancias respecto a la decisi¨®n de la juez Ruth Alonso. Y lo que ya parece a¨²n peor es querer cambiar las reglas de juego cada vez que el resultado no gusta, como ha propuesto el Sr. Ministro de Justicia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.