Los 'desaparecidos' del 'Prestige'

La irritaci¨®n del Partido Popular por la absoluta pasividad del presidente de la Xunta de Galicia, Manuel Fraga, y de varios ministros del Gobierno central durante la crisis del petrolero Prestige ha ido aumentando seg¨²n pasaban los d¨ªas, se iba conociendo el alcance del desastre econ¨®mico y ecol¨®gico y arreciaban las cr¨ªticas sobre la manera en que se hab¨ªa gestionado la crisis en los primeros d¨ªas.

"Hubiera sido mejor decir que estaba enfermo o incapacitado para desplazarse a las zonas afectadas por la marea negra, por mucho que ¨¦l se niegue a reconocer en p¨²blico su mal estado de salud", criticaba abiertamente esta semana un miembro de la direcci¨®n del PP en Madrid.

El malestar con Fraga se expresa sin tapujos: "No se puede estar callado en momentos como ¨¦stos. Ni tan siquiera acompa?¨® al vicepresidente primero Mariano Rajoy en su visita el mi¨¦rcoles a las zonas de la marea negra. Durante todo el fin de semana pasado estuvo simplemente desaparecido", se queja un dirigente regional.

Otros parlamentarios extienden las cr¨ªticas al propio vicepresidente Rajoy por su tardanza en visitar las zonas contaminadas o m¨¢s amenazadas, y, sobre todo, al ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, desaparecido tambi¨¦n del mapa, pese a tratarse de una cat¨¢strofe ecol¨®gica que afecta de lleno a su departamento.

Finalmente, otro grupo dentro del PP prefiere recordar que el ministro de Fomento, Francisco ?lvarez Cascos, es quien tiene la responsabilidad en todos los asuntos relacionados con el mar. ?sta es la versi¨®n, por ejemplo, que mantiene el delegado del Gobierno en Galicia. Arsenio Fern¨¢ndez de Mesa, la persona que m¨¢s ha dado la cara desde que el mi¨¦rcoles d¨ªa 13 se tuvieron las primeras noticias del accidente del Prestige, se ha esforzado sobre todo en defender a Mariano Rajoy, en cuyo entorno ha desarrollado toda su carrera pol¨ªtica.

"Lo peor que nos puede pasar en estos momentos, a seis meses de las elecciones municipales, es que demos la impresi¨®n de estar distra¨ªdos en temas internos o de que no gobernamos plenamente", admite un miembro del Gobierno, que niega, sin embargo, que la crisis del Prestige se haya gestionado mal.

El PP, afirma, debe salir al paso inmediatamente de cualquier impresi¨®n de que el presidente del Gobierno ya no es capaz de actuar con autoridad y rapidez porque ya no se va a presentar a la reelecci¨®n y porque todo el partido est¨¢ inmerso en la batalla de la sucesi¨®n. "?sa va a ser la t¨¢ctica del PSOE, y si cala nos podr¨ªa hacer mucho da?o", reconoce.

Los socialistas aseguran que esa falta de iniciativa y de autoridad de Aznar es precisamente la raz¨®n por la que no se desplaz¨® a Galicia y por la que nadie ha tomado el tim¨®n en la crisis. En otro momento, explican, Aznar hubiera llamado la atenci¨®n a sus ministros y les hubiera exigido m¨¢s dedicaci¨®n.

Credibilidad

"Puede parecer que nosotros hemos reaccionado con demasiada calma, pero los socialistas tampoco pueden decir que hayan andado muy vivos", contraataca un alto cargo del PP.

Los responsables del PSOE admiten que el n¨²mero dos del partido, Jes¨²s Caldera, no viaj¨® a Galicia hasta el lunes pasado, y que Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero tambi¨¦n esper¨® una larga semana para visitar las zonas afectadas, pero justifican su tardanza en la mala informaci¨®n que proporcion¨® el Gobierno y en el "sentido de la prudencia".

"Lo incre¨ªble", protesta un miembro de la ejecutiva del PSOE, "es que ahora el Partido Popular pretenda echarle toda la culpa a Manuel Fraga y dejar libre de responsabilidad al Gobierno y, sobre todo, a Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar".

La forma en la que el Gobierno y el PP han hecho frente a la cat¨¢strofe del Prestige tiene especial importancia en estas fechas, porque la batalla por la credibilidad es, seg¨²n la mayor¨ªa de los especialistas, el elemento pol¨ªtico m¨¢s importante frente a unas elecciones, y porque el Gobierno actual, seg¨²n las encuestas, est¨¢ sufriendo ya un cierto deterioro.

De acuerdo con el an¨¢lisis de algunos expertos del PP, ese deterioro se debe simplemente a la pura fatiga tras siete a?os en el poder, y, sobre todo, al hecho de no haber presentado p¨²blicamente al sucesor de Aznar. Seg¨²n otros t¨¦cnicos populares, est¨¢ provocado tambi¨¦n por determinados errores cometidos en los ¨²ltimos meses. El Gobierno, afirman, no puede dar ni un minuto m¨¢s impresi¨®n de inactividad, como ha ocurrido en Galicia.