Los voluntarios que acuden a Mux¨ªa se sienten rechazados

Wolgan Ranch, de Eglofs (Alemania), 26 a?os, decidi¨® que lo mejor era desviarse del Camino de Santiago y cambiar la peregrinaci¨®n por la contaminaci¨®n. Torci¨® hacia Mux¨ªa (A Coru?a) dispuesto a despegar con sus manos la negrura del Prestige. Era jueves, 28 de noviembre, y el ¨²nico contacto que ha tenido hasta ahora con el fuel ha sido visual.

Sus compa?eros voluntarios, alojados bajo las gradas del polideportivo de Mux¨ªa, ya le han explicado lo que le espera: "Nadie te va a coordinar ni nadie te lo va a agradecer. Te vas a desesperar porque, como a todos, te van a hacer sentir como que estorbas. Es desesperante", le explica con vehemencia el catal¨¢n Oriol Rosell¨® Comas, de 24 a?os. Ayer recibieron las primeras instrucciones para no verse afectados por la alta toxicidad del fuel.

Los voluntarios fueron recibidos en los primeros d¨ªas del desastre del Prestige como agua de mayo. Pasados los primeros d¨ªas, empezaron a sentir que ya no se les quer¨ªa. "Era desesperante", relata Rosell¨®. "Yo me present¨¦ aqu¨ª el d¨ªa 26, a pesar de que hab¨ªa llamado al Ayuntamiento y me hab¨ªan dicho que no hac¨ªa falta que viniera. A la hora y media, ya llegu¨¦ a plantear una huelga de hambre, porque la gente de Mux¨ªa ni trabajaba ni nos dejaba trabajar".

Hay vecinos de Mux¨ªa que coinciden con el catal¨¢n, pero s¨®lo lo confiesan sin testigos, y bajo promesa de que no se d¨¦ su nombre: "La gente sabe que el 15 de diciembre va a cobrar las ayudas y no piensa hacer nada, porque les han dicho que si trabajan en la limpieza no cobran. Los pescadores y los percebeiros saben que van a cobrar; menos, eso s¨ª, pero sin arriesgarse en el mar".

Al d¨ªa siguiente de Oriol lleg¨® Luis Callejo, de 32 a?os, que decidi¨® aprovechar unas peque?as vacaciones para ayudar. La semana que viene se incorpora como actor a la Compa?¨ªa Espa?ola de Teatro Cl¨¢sico para preparar El burlador de Sevilla. Y sinti¨® lo mismo. "Me miran raro", dice. Y no es porque lleva un mono blanco cuajado del engrudo del Prestige. "Nadie nos coordina ni nos dice nada. Hoy est¨¢bamos sacando piedras manchadas de la playa, para limpiarlas, y vino gente a decirnos que lo dej¨¢ramos, que no sirve para nada".

Callejo coincidi¨® en las playas con David V¨¢zquez Vaamonde, vigu¨¦s de 32 a?os. "En las playas estaban unos de verde, los contratados por la empresa Tragsa (a 30 euros al d¨ªa) trabajando por su lado, y nosotros, de blanco, a nuestro aire. Ni una indicaci¨®n o una instrucci¨®n". Los voluntarios piden consejo a Fernando Ovejero, asegurador, que con cinco d¨ªas de recogida, ya es el experto reconocido por todos. "Nada m¨¢s llegar me dieron las llaves del polideportivo, sin conocerme de nada, y el equipo de limpieza, botas, mono, guantes y mascarilla. Pregunt¨¦ qu¨¦ pod¨ªa hacer y me dijeron: haz lo que quieras".

La veintena de voluntarios es internacional.Hay suizos, quebequeses, franceses, belgas... Y s¨®lo seis espa?oles en Mux¨ªa. "Ninguno es del pueblo, porque les han dicho que esto es t¨®xico". En caso de accidente, los voluntarios no tienen cobertura y no est¨¢ claro qui¨¦n deber¨ªa hacerse cargo de su asistencia. Los contratados de Tragsa, en cambio, est¨¢ cubiertos.

El jefe del Servicio de Informaci¨®n del Instituto Nacional de Toxicolog¨ªa, Jos¨¦ Cabrera, recomend¨® a los voluntarios que establezcan turnos, de forma que ninguno est¨¦ sobre el vertido m¨¢s de cinco horas seguidas. Esa precauci¨®n evitar¨¢ el principal efecto potencial del fuel sobre la salud, la bronquitis qu¨ªmica, que causa problemas respiratorios y dolor de garganta. "Para trabajar con hidrocarburos", explic¨® Cabrera, "hay que usar guantes y traje de goma, gafas de pl¨¢stico para evitar salpicaduras y mascarillas con filtro, porque los hidrocarburos son vol¨¢tiles".

Los voluntarios de Mux¨ªa han estado trabajando hasta ocho horas sobre el fuel, sin gafas ni mascarillas con filtro, s¨®lo unas peque?as de papel. En la misma arena de Muxia, Fernando Ovejero, no piensa desistir, por ahora. "Pero si la gente del pueblo sigue as¨ª, la marea negra va a llegar y se van a encontrar solos, porque nos vamos a ir". Dinnat Nanosque, franc¨¦s, se fue ayer.