Contra las regulaciones de parcheo
"Es la obra m¨¢s importante del derecho de sociedades escrita en Am¨¦rica durante el siglo XX". As¨ª se recibi¨® esta obra en el claustro mercantil. En un momento en que Europa recibe hiperregulaci¨®n societaria, desde la c¨¢tedra de Harvard los profesores Easterbook y Fischel hacen, en lenguaje claro y transparente, una defensa razonada de la autonom¨ªa de la voluntad como par¨¢metro b¨¢sico de la estructuraci¨®n interna (inter partes) y externa (legisladores, jueces y dem¨¢s operadores) del derecho de sociedades. La misi¨®n del derecho mercantil no es configurar contratos, sino integrar e interpretar los que la autonom¨ªa de los ciudadanos en la b¨²squeda de la eficiencia econ¨®mica conciba, y la misi¨®n complementaria del derecho no debe tener otro par¨¢metro que la exploraci¨®n de lo que presumiblemente hubieren concebido en aquella b¨²squeda los contratantes. El ¨²nico problema que el derecho de sociedades debe resolver es el de buscar y proporcionar la regla que, aplicada de modo uniforme, maximalice el valor de la empresa societaria.
La estructura econ¨®mica del derecho de las sociedades de capital
Frank H. Easterbrook y Daniel R. Fischel Fundaci¨®n Cultural del Notariado ISBN 84-921890-6-1
El libro dedica un cap¨ªtulo a las sociedades cerradas preocup¨¢ndose de diferenciarlas claramente de las sociedades personalistas, pero su n¨²cleo b¨¢sico est¨¢ destinado a las sociedades abiertas con accionistas dispersos, principalmente las que cotizan en los mercados de valores. Su an¨¢lisis de la responsabilidad limitada y el seguro como alternativa, su concepci¨®n del equilibrio entre la fiducia del administrador, la regla de la discrecionalidad empresarial (business judgment rule) y la responsabilidad consiguiente frente a los beneficiarios de la fiducia, sus apuntes sobre la transparencia societaria, y su enfoque de problemas tan candentes como el valor real de las acciones, las compras de valores basadas en una informaci¨®n privilegiada o las tomas de control son paradigm¨¢ticas
Con admirable desparpajo,Easterbrook y Fischel entronizan la eficiencia como par¨¢metro universal, nuevo becerro de oro al que deben rendir pleites¨ªa no ya los contratantes, sino -en el papel complementario que le asignan- el propio legislador. Reprueban el recurso a la junta y al voto si incrementan los costes de agencia, estiman que la financiaci¨®n por la sociedad de las propuestas de las minor¨ªas o divulgar m¨¢s informaci¨®n sobre la propia actividad son comportamientos contrarios al principio de maximalizar el beneficio, creen que una mayor inversi¨®n de los gestores de fondos institucionales para matizar el sentido del voto de sus inversores puede ser contrario a la m¨¢xima de la eficiencia... porque pueden reducir el ¨²nico derecho realmente tutelable, el derecho al beneficio y al excedente patrimonial
Late la m¨¢xima de Wall Street: Vota con los administradores o vende tus acciones. Aplicando el an¨¢lisis econ¨®mico para explicar el derecho vigente, concluyen que las normas jur¨ªdicas m¨¢s eficientes, aquellas que producen mayor riqueza para los contratantes, son las que han terminado por prevalecer.
Con esta obra y el Derecho de sociedades del catedr¨¢tico de la Universidad de Francfort Friedrich Kubler, tambi¨¦n editado hace unas semanas por la Fundaci¨®n Cultural del Notariado, quedan a disposici¨®n las dos obras de referencia mundial, una alemana y otra anglosajona, sobre el derecho de sociedades.
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