Joven y brillante
Alfonso Prat Gay, de 37 a?os, es el quinto presidente del Banco Central de Argentina en los ¨²ltimos 20 meses y uno de los m¨¢s j¨®venes en ocupar ese cargo. En los c¨ªrculos financieros, no s¨®lo locales, se le reconoce su brillantez intelectual, que deber¨¢ hacer pesar m¨¢s que su menor experiencia. El Gobierno de Eduardo Duhalde lo design¨® esta semana para reemplazar a Aldo Pignanelli, que renunci¨® despu¨¦s de tres regates anteriores por las diferencias con el ministro de Econom¨ªa, Roberto Lavagna.
Prat Gay, que espera la ratificaci¨®n del Senado, ha heredado desaf¨ªos tan inmensos como el mantenimiento del valor del peso, la recuperaci¨®n de reservas, la apertura del corral¨®n financiero (congelaci¨®n de dep¨®sitos a plazo), la reestructuraci¨®n del sistema bancario y la negociaci¨®n de la deuda externa p¨²blica y privada.
Prat Gay se destac¨® como analista del banco de inversi¨®n JP Morgan, donde ingres¨® en 1994 y permaneci¨® hasta el a?o pasado. En 1998 se gradu¨® de economista con honores en la Universidad Cat¨®lica Argentina y a los 29 a?os obtuvo el master de esa materia en la Universidad de Pennsylvania (Estados Unidos). No regres¨® de inmediato a su pa¨ªs sino que se incorpor¨® a la oficina de JP Morgan en Nueva York. Pront¨® se gan¨® cierto prestigio en Wall Street y las revistas Institutional Investor y Latin Finance lo premiaron por su trabajo sobre la econom¨ªa suramericana. En 1996 volvi¨® a Buenos Aires como estratega para la toma de posiciones en activos de mercados emergentes, pero tres a?os despu¨¦s parti¨® a Londres para encabezar el equipo de analistas de monedas y metales preciosos.
Domingo Cavallo, el superministro de Econom¨ªa del Gobierno del radical Fernando de la R¨²a, lo tent¨® para regresar a Argentina el a?o pasado como vicepresidente del Banco Central. En 2000, Financial Times lo hab¨ªa elogiado por su estilo "m¨¢s tradicional, m¨¢s heterodoxo". En Argentina, en cambio, Prat Gay estaba considerado por los mercados como un ortoxodo liberal, aunque ¨¦l prefer¨ªa ubicarse en una posici¨®n m¨¢s moderada. Sin embargo, el Senado, dominado por el peronismo, rechaz¨® su designaci¨®n. Los legisladores objetaron que Prat Gay trabajara en la entidad (JP Morgan) que en esa ¨¦poca estaba organizando el megacanje de la deuda p¨²blica de Argentina.
Pese a la crisis, Prat Gay regres¨® a Argentina a principios de 2002 para encabezar una consultora. En ese tiempo desarroll¨® varios an¨¢lisis sobre la negociaci¨®n de la deuda y culp¨® a la "impericia" del Gobierno de Duhalde y la "obstinaci¨®n cortoplacista" del FMI por la falta de un acuerdo para su pa¨ªs.
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