El Betis se resiente
Un gol de Onopko da el triunfo al Rayo frente a un conjunto alica¨ªdo
Lo que se anunci¨® hace dos jornadas ante el Athletic se consum¨® ayer frente al Rayo, que, espoleado a¨²n por su inopinada victoria sobre el Bar?a, acab¨® desquiciando a un Betis al que se le ha gripado la maquinaria y que sum¨® su tercera derrota en la Liga. Resentido por su eliminaci¨®n frente al Auxerre en la Copa de la UEFA, el equipo de V¨ªctor Fern¨¢ndez fue incapaz de cogerle el punto al encuentro y, pese a la escasa renta de los madrile?os y a las incontables ocasiones de las que disfrut¨®, acab¨® dislocado y renqueante. La acumulaci¨®n de partidos, las mermadas facultades de sus figuras -Joaqu¨ªn caus¨® baja y Assun?ao y Capi andan tocados- y la falta de fortuna -Alfonso estrell¨® un penalti en el palo- se erigieron en escollos casi insalvables para los b¨¦ticos, que, a falta de facultades, se exprimieron en lo f¨ªsico para tratar de nivelar un partido que Onopko pronto decant¨® del lado rayista.
BETIS 0 - RAYO 1
Betis: Prats; Tais (Jo?o Tom¨¢s, m. 37), Rivas, Filipescu (Assun?ao, m. 64), Luis Fern¨¢ndez; Ito, Fernando, Varela, Denilson; Capi; y Alfonso. Rayo Vallecano: Etxeberria; Mario, Graff, Mainz (Corino, m. 75), De Quintana, Julio ?lvarez (Perag¨®n, m. 57), Azkoitia, Onopko, M¨ªchel; Mora (Tal, m. 57) y Bolic. Gol: 0-1. M. 16. Onopko peina de cabeza una falta botada por M¨ªchel. ?rbitro: Pino Zamorano. Amonest¨® a Jo?o Tom¨¢s, Alfonso, Ito, Luis Fern¨¢ndez, Denilson y Assun?ao, del Betis, y a Mora, Mario y Perag¨®n, del Rayo Vallecano. Unos 25.000 espectadores en el estadio Manuel Ruiz de Lopera.
Pero la reserva f¨ªsica no fue bastante argumento porque para f¨ªsico el de los jugadores de Fernando V¨¢zquez, que no cejaron un instante en su t¨¢ctica de acoso y derribo mediante fulgurantes contras que casi nunca encontraron m¨¢s oposici¨®n que su propio infortunio o la certera actuaci¨®n de Prats. Sin peso en el centro del campo, donde la pareja Ito-Fernando hablaban idiomas distintos; sin la capacidad de desborde de Joaqu¨ªn y con Alfonso a medio gas, poco era lo que pod¨ªa hacer el Betis, que, de nuevo, encontr¨® en Capi resguardo. Hubo momentos en que Capi, al igual que Onopko -infranqueable-, parec¨ªa contar con el don de la ubicuidad. Lo mismo se inventaba un pase en la banda derecha que corr¨ªa sin freno por el centro para nutrir de balones a Alfonso y al ayer obtuso Fernando, pero su esfuerzo s¨®lo mereci¨® las cerradas ovaciones que le brind¨® el p¨²blico.
En este querer y no poder se movi¨® el Betis todo el partido para tranquilidad del Rayo, que una y otra vez vio c¨®mo los sevillanos se bastaban ellos solitos para desperdiciar las numerosas ocasiones de gol nacidas de la calidad de Capi y Denilson, eso s¨ª, con todos los jugadores rayistas arropando en el barullo a su portero Etxeberria.
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