Cascos critica a los huelguistas de hambre y los opone a los que se vuelcan contra la marea

La mayor¨ªa de los miembros del Gobierno y de la Xunta trataron ayer de evitar una controversia p¨²blica con los tres patrones de cofrad¨ªas de las R¨ªas Bajas que han iniciado una huelga de hambre para reclamar m¨¢s medios, pero el ministro de Fomento, Francisco ?lvarez-Cascos, volvi¨® a saltarse el gui¨®n. ?lvarez Cascos opuso la actitud de los patrones que han adoptado esa medida de protesta con los compa?eros suyos que "est¨¢n volc¨¢ndose en su trabajo". "Cuando nosotros recog¨ªamos el chapapote, ¨¦l andaba de cacer¨ªa", le replic¨® el patr¨®n mayor de O Grove, Francisco Iglesias.

Mientras el vicepresidente primero del Gobierno, Mariano Rajoy, o el consejero de Pesca de la Xunta, Enrique L¨®pez Veiga, trataban de no encrespar m¨¢s los ¨¢nimos de los marineros, Cascos a?adi¨® le?a al fuego con unas declaraciones que irritaron a los huelguistas de hambre, los patrones de O Grove y A Pobra do Carami?al y el gerente de la cofrad¨ªa de Cangas do Morrazo. Los tres han estado en primera l¨ªnea organizando a los marineros desde que la marea negra empez¨® a amenazar las R¨ªas Bajas. Pero el ministro, aunque expres¨® su "respeto" a la protesta, resalt¨® a continuaci¨®n: "Mientras unos est¨¢n en huelga de hambre, otros se vuelcan en su trabajo". Frente a las cr¨ªticas de los marineros, que temen que si llega otra avalancha de fuel se encuentren de nuevo solos con sus barcos y sus manos, Cascos proclam¨® que el Gobierno y la Xunta est¨¢n poniendo "todo lo que est¨¢ al alcance de su capacidad t¨¦cnica y humana" para hacer frente a la crisis.

Los marineros llevan dos semanas pidiendo infructuosamente bombas de achique para instalar en sus barcos y barreras para cercar el fuel en las r¨ªas. Pero Rajoy se toma su tiempo y, seg¨²n dijo ayer en A Coru?a, el Gobierno a¨²n va a estudiar si son necesarios m¨¢s medios. Como soluci¨®n inmediata, el vicepresidente adelant¨® que asignar¨¢ a un t¨¦cnico de la Xunta y otro de Sasemar a cada capitan¨ªa mar¨ªtima para que estudien las demandas de los marineros r¨ªa por r¨ªa.

Los patrones, que ayer iniciaron el encierro y huelga de hambre en sus respectivas cofrad¨ªas, exigen algo m¨¢s que promesas gen¨¦ricas. "Dicen que nos han dado m¨¢s medios, porque ahora tenemos botas y ropas de agua. ?Y de qu¨¦ nos sirve eso para contener la marea negra?", protesta uno de los huelguistas, el patr¨®n de Pobra, Manuel Maneiro. "?Seremos capaces otra vez de evitar que el fuel entre en la r¨ªa s¨®lo con nuestros barcos? Esto sigue igual que el primer d¨ªa". Maneiro resalta que en toda la r¨ªa de Arousa, donde el mar genera 28.000 puestos de trabajo directos, s¨®lo disponen de tres bombas de achique, pese a reclamarlas desde hace d¨ªas. "Y las tenemos porque las alquil¨® la cofrad¨ªa de Cambados", resalta.

Dispuesto a permanecer indefinidamente sin ingerir otra cosa que l¨ªquidos, Maneiro no tiene demasiado ¨¢nimo para polemizar con Cascos: "S¨®lo le digo una cosa: para saber lo que es el chapapote, hay que estar en medio de ¨¦l". Al igual que sus compa?eros de Cangas y O Grove, tambi¨¦n justifica la medida como un acto de desesperaci¨®n: "Yo soy marinero y cuando vas en un barco en medio de una tormenta sin nadie al tim¨®n te sientes realmente muy desesperado".

Aunque el viento haya dado un respiro a las R¨ªas Bajas arrastrando las manchas hacia el norte, nadie cree que el peligro haya pasado. "Esto es s¨®lo una tregua", advierte Maneiro. "La basura que hay en el mar acabar¨¢ en la tierra. Y eso es como una hipoteca permanente para nosotros".

En las sedes de las cofrad¨ªas que protagonizan la huelga se han recibido numerosos mensajes de apoyo. En O Grove, algunos marineros han expresado su prop¨®sito de sumarse al acto de protesta del patr¨®n mayor.