La econom¨ªa china culmina el a?o con un crecimiento del 8%
El tir¨®n exportador y la inversi¨®n extranjera rompen las previsiones
La econom¨ªa china ha cerrado un a?o de ferviente actividad. En un contexto mundial de morosidad e incertidumbre, el PIB (producto interior bruto) del pa¨ªs asi¨¢tico creci¨® un 8% en 2002, seg¨²n anunci¨® la Oficina Nacional de Estad¨ªstica. Esta cifra casi triplica el 2,8% previsto por el FMI para el conjunto del mundo. La econom¨ªa del llamado Imperio del Centro se ha visto impulsada por las exportaciones y una inversi¨®n extranjera r¨¦cord.
El comportamiento del PIB, que ha ascendido a 10,2 billones de yuanes (1,23 billones de d¨®lares), ha superado el objetivo del 7% que se fij¨® el Gobierno. Es el valor m¨ªnimo que las autoridades consideran que necesita el pa¨ªs para absorber los millones de trabajadores que est¨¢n siendo despedidos como consecuencia de la reforma de las empresas estatales. El a?o pasado, la actividad creci¨® un 7,3%.
Uno de los principales motores de la econom¨ªa china son las exportaciones, que en los 11 primeros meses alcanzaron 293.700 millones de d¨®lares, lo que supone un crecimiento del 22% respecto al mismo periodo del a?o pasado. Aproximadamente la mitad de las ventas al exterior proceden de productos fabricados en factor¨ªas de empresas extranjeras. Este valor da idea de la importancia de la inversi¨®n for¨¢nea, que este a?o alcanzar¨¢ un r¨¦cord de 50.000 millones de d¨®lares, superando por primera vez la del principal receptor mundial, Estados Unidos.
Sectores como el automovil¨ªstico o el de las telecomunicaciones est¨¢n incrementando la capacidad productiva en China para responder a la demanda de la creciente clase media y aprovechar con vista a las exportaciones su barata mano de obra. Grupos como Toshiba, Honda o General Motors consideran clave el mercado chino y han multiplicado su esfuerzo inversor. M¨¢xime tras la entrada del pa¨ªs en la Organizaci¨®n Mundial de Comercio (OMC) en diciembre del a?o pasado.
Otro de los motores es la inversi¨®n p¨²blica, que hasta noviembre creci¨® un 23% respecto al a?o pasado. China carece a¨²n de muchas infraestructuras, y los proyectos se multiplican por todo el pa¨ªs. Autopistas, embalses, aeropuertos y l¨ªneas ferroviarias son s¨®lo algunas de las instalaciones que atraen el inter¨¦s de las empresas extranjeras en busca de una porci¨®n de la tarta estatal.
Varios retos
Pero, a pesar de la favorable evoluci¨®n del PIB, el Gobierno de Pek¨ªn tiene que hacer frente a varios retos: una deflaci¨®n persistente, un sistema bancario acosado por los malos cr¨¦ditos y una corrupci¨®n rampante.
Para el a?o que viene, las perspectivas siguen siendo halag¨¹e?as. "Esperamos que crezca alrededor de un 8% en la primera mitad del a?o", ha asegurado Song Guoqing, economista jefe del Consejo Ejecutivo de la Bolsa China. En el conjunto de 2003, la cifra se prev¨¦ que alcance sin problemas el 7%. Seg¨²n los analistas, sin embargo, la actividad exportadora se enfriar¨¢ a mediados de a?o.
El Gobierno anunci¨® tambi¨¦n la producci¨®n industrial de 2002: tres billones de yuanes (362.000 millones de d¨®lares), lo que representa un aumento del 12%. Y cifr¨® el flujo comercial en 620.000 millones de d¨®lares, frente a 509.800 millones en 2001.
Las autoridades est¨¢n lanzadas en una carrera hacia el desarrollo, con el objetivo de extender durante las pr¨®ximas dos d¨¦cadas el bienestar a toda la poblaci¨®n. Entre 2000 y 2020 pretenden cuadruplicar el producto interior bruto, hasta 4,32 billones de d¨®lares, al cambio actual. De esta forma quieren hacer frente a una de las principales amenazas que se ciernen sobre el pa¨ªs: la posible inestabilidad social generada por la creciente diferencia de ingresos entre ricos y pobres, entre las ciudades y el campo, y entre la costa y el interior.
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