"La reforma demuestra que el PP usa el terrorismo de forma partidista"

Juan Alberto Belloch fue el ministro de Justicia que, en el ultimo Gobierno socialista, impuls¨® la reforma del C¨®digo Penal que entr¨® en vigor en 1996. Hoy, ante el anuncio de su reforma por parte de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, se muestra sorprendido ante una decisi¨®n que califica de "oportunista" y recuerda que la reforma la votaron todos los partidos.

Pregunta. ?Qu¨¦ opina del anuncio de Aznar sobre la modificaci¨®n del art¨ªculo 78 del C¨®digo Penal para endurecer las penas a los terroristas?

Respuesta. Vamos a matizar. Cuantitativamente es poco relevante; se reforma un art¨ªculo, el 78, de los 3.000 que tiene ese C¨®digo. En ese sentido, no me parece muy significativa.

P. La reforma habla de un endurecimiento de las penas, que pasan de 30 a 40 a?os.

R. Es lo que no comprendo. Ese apartado se discuti¨® en su tiempo. El tiempo de cumplimiento de las penas se dejaba en manos de los jueces. Ahora parece que va a ser una medida generalizada. La extensi¨®n de la pena, salvo que haya quiebra del principio de proporcionalidad, es opinable, no es inconstitucional. Pero hay algo que me extra?a: no entiendo que hayan esperado seis a?os para aplicarlo. De hecho, hay un debate entre los juristas que opinan que extender la pena no lleva a ning¨²n lado, porque es dif¨ªcil que se cumpla la totalidad de la condena.

P. Parece convencido de que hay otros motivos tras la decisi¨®n: ?Ocultar el desastre del Prestige?, ?lavarse la cara ante la opini¨®n p¨²blica?

R. Es leg¨ªtimo pensar que eso obedece a esa causa. Hoy a cualquier ciudadano, en el clima que vive Espa?a, le preguntan si un terrorista debe cumplir una condena de 600 a?os y le parece bien. Es natural. Pero insisto, es leg¨ªtimo pensar que tras esa medida hay otras cuestiones, un planteamiento t¨¢ctico y hay un hecho muy grave.

P. ?Cu¨¢l, el de la imposibilidad de redimir la pena?

R. Pues s¨ª. Excluir el horizonte de la rehabilitaci¨®n va contra el art¨ªculo 25 de la Constituci¨®n. Lo dice claramente: las penas deben concebirse con el horizonte de la rehabilitaci¨®n. Por supuesto est¨¢ el aspecto retributivo de la pena, es decir, hay que pagar lo que se ha hecho porque hay v¨ªctimas y perjudicados, pero un mecanismo que excluya la rehabilitaci¨®n vulnera de forma flagrante la Constituci¨®n.

P. Hay quien piensa que un terrorista no se redime. ?Cu¨¢l ser¨ªa el mecanismo para saber si se ha arrepentido?

R. La ¨²nica forma de arrepentimiento y de redenci¨®n es abandonar ETA. Luego hay una serie de mecanismos garantistas para conocer el grado de arrepentimiento. Es decir, ser m¨¢s o menos exigentes con los requisitos para saber si hay o no voluntad de arrepentimiento.

P. ?En qu¨¦ cree que quedara finalmente la propuesta?

R. Hay que conocer m¨¢s a fondo c¨®mo van a plantearlo porque deber¨¢n afinar. Cuando lo lleven al Congreso deber¨¢n explicar mejor las cosas y matizarlas. ?Qu¨¦ va a hacer el PP en el futuro? Ellos mismos se han puesto un cors¨¦. Legislan a golpe de circunstancias, ?cambiar¨¢n el C¨®digo Penal cada vez que pase algo con la banda?, ?y si desaparece ETA, se mantendr¨¢ la medida, seguir¨¢n los terroristas en la c¨¢rcel? Se limitan.

P. ?En qu¨¦ medida esta decisi¨®n es una deslealtad con los firmantes del Pacto Antiterrorista?

R. Eso es muy grave porque lo vulnera. Cualquier medida que se adopte debe hacerse con el conocimiento de quienes lo firmaron. Es populista, oportunista, supone violar un acuerdo, ladearlo y de nuevo demuestra que el PP usa de forma partidista el terrorismo. Algo que nosotros nunca hicimos. Lo hacen ellos. El pecado original de esta medida es su oportunismo.