La ola de fr¨ªo polar obliga a abrir el metro de Atocha para los indigentes

La ola de fr¨ªo polar prevista para los pr¨®ximos d¨ªas ha obligado al Ayuntamiento a abrir, desde esta noche, la estaci¨®n de metro de Atocha para que se cobijen en ella los indigentes. Este refugio suburbano, consistente en un pasillo donde hasta 100 personas pueden dormir en el suelo, abre todos los a?os cuando el term¨®metro baja de cero grados. Este cobijo funciona de 22.00 a 8.00 y dispone de atenci¨®n social, retretes y reparto de mantas, bocadillos y caf¨¦. A ¨¦l acuden quienes rechazan los albergues por sus normas o no encuentran plaza en ellos. Las 1.300 plazas de los albergues tienen ya una ocupaci¨®n media del 95%, pese a que a¨²n no han llegado las noches m¨¢s inclementes.

Cerca de medio millar de personas duermen cada noche en las calles del centro de la capital, seg¨²n un estudio de la Universidad de Comillas coordinado por el soci¨®logo Pedro Jos¨¦ Cabrera para el futuro Plan contra la Mendicidad que preparan el Ayuntamiento y el Gobierno regional.

Los autores de este informe ven necesario un incremento del n¨²mero de plazas de acogida, algo en lo que tambi¨¦n coinciden los responsables municipales del programa de personas sin hogar. Proponen tambi¨¦n que se pongan en marcha m¨¢s programas de apoyo a pie de calle para conseguir que las personas sin hogar que m¨¢s rechazan los albergues, algunas de ellas con las facultades mentales perturbadas, acepten acudir a ellos. Paralelamente, sugieren que se flexibilicen, en la medida de lo posible, las condiciones de acceso a los refugios, sus horarios y normas.

Portavoces de la Concejal¨ªa de Servicios Sociales reconocen que el uso del metro de Atocha como refugio es siempre una medida pol¨¦mica por su falta de condiciones. Pero la justifican como una alternativa m¨¢s para quienes no acceden a los albergues existentes. Y aducen, adem¨¢s, que, desde el a?o pasado, en este refugio del suburbano, con capacidad para unas 100 personas, hay siempre una trabajadora social que intenta derivar a otros centros m¨¢s confortables a quienes as¨ª lo soliciten. El problema es que encuentre plazas para ellos.

Camas de emergencia

De hecho, los albergues madrile?os est¨¢n a tope. Incluso en algunos de ellos se han llenado hasta las plazas de emergencia. En la noche del martes, seg¨²n datos de Servicios Sociales, estaban ocupadas el 94% de las 87 plazas del refugio de Mayorales (12 de ellas de emergencia), en la Casa de Campo. El 63% de los usuarios de este pabell¨®n, que abre s¨®lo en invierno, es inmigrante, sobre todo de los pa¨ªses del Este.

En el centro de acogida municipal de San Isidro (Moncloa) estaban completas el 97% de sus 296 camas y en el Don de Mar¨ªa (Centro), con capacidad para 80 personas tumbadas en el suelo, la ocupaci¨®n era tambi¨¦n total. Lo mismo ocurr¨ªa en el centro Puerta Abierta, con 80 camas para personas muy marginadas (toxic¨®manos, alcoh¨®licos...). Este a?o, por primera vez, el Consistorio dispone de 25 camas en pensiones a las que recurre cuando no hay plazas en los albergues. Diez de ellas est¨¢n ya ocupadas.

En los albergues privados, todos de ¨®rdenes religiosas, tambi¨¦n hay lleno. En el de San Juan de Dios (Chamart¨ªn) est¨¢n copadas el 93% de sus 230 plazas y en el de San Mart¨ªn de Porres (Latina) se han cubierto el 98% de las 50 camas disponibles (suele haber 75, pero el n¨²mero se ha reducido temporalmente por unas obras).

En el centro Calor y Caf¨¦, que C¨¢ritas regenta en la plaza de la Marina Espa?ola (Centro), cada noche se llenan los 40 butacones en los que las personas sin hogar y sin recursos pueden dormitar y cobijarse del fr¨ªo. Hasta hace seis meses, en este centro se formaban largas colas, de hasta 130 indigentes, esperando encontrar un hueco en el local. Pero esas aglomeraciones, que daban lugar a peleas y conflictos, provocaron protestas vecinales por lo que el sistema de acceso al centro se ha restringido. Ahora es un trabajador social quien decide qui¨¦n puede pasar la noche en el recinto despu¨¦s de mantener una entrevista con cada demandante de ayuda.

Tambi¨¦n los dos albergues municipales para inmigrantes, regentados por Cruz Roja en San Blas (120 camas) y Casa de Campo (60) est¨¢n al completo.