Repatriados
Estaban instalados en la miseria. Ven¨ªan al centro de la ciudad desde su asentamiento chabolista del puente de la A-49, entre Sevilla y Huelva. Ah¨ª viv¨ªan, debajo de un puente, un lugar excluido de los beneficios de la ciudad. No era ciudad. Ellos eran inmigrantes, rumanos. La mayor¨ªa sin papeles. Creci¨® el problema, como suele pasar cada vez que alguno se plantea y no se soluciona, y ¨¦ste llevaba planteado hace cuatro a?os. Cuatro a?os en los que se fue haciendo la vida en el lugar cada vez m¨¢s complicada y el asentamiento se fue convirtiendo en foco de conflictos.
El embajador rumano ha expresado respeto a la decisi¨®n, consensuada entre todas las administraciones, de repatriar a esos ciudadanos, que son libres de salir o entrar en su pa¨ªs cada vez que les venga en gana, pero que no lo son de permanecer en otro pa¨ªs si no tienen permiso de residencia y todos sus papeles en regla. As¨ª est¨¢n las leyes y el orden del mundo. Lo que no quiere decir que est¨¦n bien, est¨¢n simplemente.
Tambi¨¦n es cierto y es un dato con el que hay que contar, que la vida que buscan fuera del lugar en el que han nacido, que es donde deber¨ªan poder tener derecho al futuro, tampoco la encuentran aqu¨ª viniendo sin ninguna garant¨ªa de trabajo y sin los papeles que les exige la ley. Por eso, porque a su vida, a la manera en que viv¨ªan, asentados debajo de un puente, le faltaba dignidad, hab¨ªa que encontrarle una soluci¨®n. Sin duda la ley ampara la m¨¢s r¨¢pida y la m¨¢s f¨¢cil. Ahora todas las administraciones se han comprometido a actuar para acabar con el asentamiento y prestar asistencia sanitaria, social y educativa a las m¨¢s de 50 personas que todav¨ªa permanecen en el lugar y tienen sus papeles en regla. No se han dado plazos pero est¨¢n obligadas a actuar de inmediato si no quieren que solucionada la primera parte del problema siga ¨¦ste creciendo en la parte que sigue sin soluci¨®n.
De momento, las personas sin papeles, volver¨¢n a su pa¨ªs y, si salieron de ¨¦l porque no les ofrec¨ªa futuro, ?qu¨¦ encontrar¨¢n ahora?... Aqu¨ª tampoco parec¨ªa f¨¢cil que llegaran a tenerlo, por eso es razonable que, con la ley en la mano, se act¨²e en consecuencia. Nada que oponer. Y sin embargo...
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