Las rebajas de fin de a?o contienen en el 2,4% el IPC de EE UU

Estados Unidos cerr¨® el a?o 2002 con una inflaci¨®n del 2,4%, tras confirmarse que el ¨ªndice de los precios al consumo (IPC) s¨®lo subi¨® una d¨¦cima en diciembre. La contenci¨®n la inflaci¨®n, datos sobre la relativa contenci¨®n del desempleo y estimaciones r¨¦cord para el d¨¦ficit en 2003 y 2004 dieron fuerza a los cr¨ªticos del plan de est¨ªmulo econ¨®mico presentado por George Bush, que hasta los propios republicanos admiten que sufrir¨¢ recortes en el Congreso.

La inflaci¨®n est¨¢ contenida en Estados Unidos, ayudada en diciembre por los fuertes descuentos en el comercio y una ca¨ªda en los precios de la energ¨ªa. La inflaci¨®n interanual lleg¨® en el a?o 2002 al 2,4%, tasa a la que hay que rebajar medio punto si se extrae de la ecuaci¨®n elementos vol¨¢tiles como energ¨ªa y alimentaci¨®n.

La contenci¨®n en los precios es buena para el consumidor, pero desincentiva la inversi¨®n al exprimir los beneficios de las empresas. Como contrapartida, las nuevas reclamaciones de subsidio de desempleo cayeron hasta un promedio de 387.500 semanales durante el pasado mes, por debajo de los 400.000 que marcan el umbral de un mercado laboral muy deprimido. La tasa desempleo sigue en el 6%.

Est¨ªmulos

En esta aton¨ªa se ampar¨® Bush para promover su programa de est¨ªmulos econ¨®micos, valorado en 670.000 millones en diez a?os. Sus cr¨ªticos consideran que es excesivamente generoso en el recorte de impuestos, en particular con la total eliminaci¨®n del que afecta a los dividendos, y mantienen que hay que dejar m¨¢s tiempo para que hagan efectos otras intervenciones reversibles, como la rebaja de los tipos decretada por la Reserva Federal.

La Casa Blanca ha contribuido a la pol¨¦mica al anunciar que el d¨¦ficit federal va a subir este a?o y el que viene hasta la horquilla de los 200.000-300.000 millones de d¨®lares (entre el 2% y el 3% del PIB). Wall Street califica de conservadora esta cifra y dice que superar¨¢ los 300.000 en el 2003, por encima del r¨¦cord de 290.000 millones establecido en 1992. A las cr¨ªticas de la oposici¨®n sobre los planes de Bush responde la Administraci¨®n con el argumento de que los est¨ªmulos incentivar¨¢n la actividad econ¨®mica y con ella los ingresos fiscales.

Bush necesita el apoyo de todos los senadores republicanos y el de otros diez dem¨®cratas para que su plan salga adelante. Seis dem¨®cratas y cinco republicanos, todos moderados, llegaron el mi¨¦rcoles a la conclusi¨®n de que el programa es muy gravoso y que su elemento estelar, la desaparici¨®n de la fiscalidad sobre los dividendos, no es tan decisivo para la econom¨ªa como pretende la Casa Blanca. El senador republicano Charles Grassley adelant¨® que el plan tendr¨¢ que ser modificado.