Protestas y aplausos

Volvi¨® la Orquesta Nacional a la programaci¨®n de los viernes, despu¨¦s de las semanas de huelga que priv¨® a los abonados y asiduos de los viernes y s¨¢bados. No es que el asunto est¨¦ resuelto -seg¨²n informes recogidos de la direcci¨®n t¨¦cnica de la ONE-. Se trata de una suspensi¨®n del paro mientras prosiguen las negociaciones con intervenci¨®n de unos mediadores. De cualquier manera, la presencia en la escena de la ONE fue "saludada" con una pitada, gritos de "fuera" y otras expresiones ininteligibles.

En medio de este ambiente, que se reprodujo con mayor duraci¨®n antes de la segunda parte, el director, Pedro Halffter, expuso su interesante y original programa: Retablo de maese Pedro, de Falla, frente a la gigantista orquesta de la Sinfon¨ªa alpina, de Strauss. Que la situaci¨®n cre¨® una cierta tensi¨®n se advirti¨® ya en el tempo, excesivamente r¨¢pido, con que el maestro atac¨® la genial partitura de Falla, t¨®nica que quit¨® sosiego, inter¨¦s y belleza a una obra magistral en grado sumo. Al Trujam¨¢n de Mar¨ªa Jos¨¦ Su¨¢rez le falt¨® naturalidad, y al Don Quijote de Carlos Bergara, pasi¨®n en la "invocaci¨®n a Dulcinea". Quiz¨¢ el personaje m¨¢s ajustado, por voz, estilo y dicci¨®n, fue el maese Pedro de Jos¨¦ Cabero.

Halffter domina y entiende una obra de la magnitud, complejidad y prolijidad orquestal como es la Alpina, de Strauss. Maestro y profesores fueron aplaudidos por su labor seria, brillante.