Antonio Dom¨ªnguez Ortiz, el gran historiador de la Espa?a moderna, muere a los 93 a?os

El historiador y acad¨¦mico de la Historia Antonio Dom¨ªnguez Ortiz falleci¨® ayer en un hospital de Granada, donde ingres¨® unas horas antes a consecuencia de un derrame cerebral. Dom¨ªnguez Ortiz, premio Pr¨ªncipe de Asturias de Ciencias Sociales en 1982, mantuvo hasta el final una intensa actividad intelectual. El historiador preparaba una historia sint¨¦tica de Andaluc¨ªa, encargada por la presidencia del Parlamento aut¨®nomo, e iba a comenzar un libro sobre la esclavitud en la Espa?a contempor¨¢nea. Dom¨ªnguez Ortiz, historiador esencial de los siglos XVI a XVIII, ten¨ªa 93 a?os.

Antonio Dom¨ªnguez Ortiz, colaborador habitual de EL PA?S -escribi¨® su ¨²ltimo art¨ªculo en el ¨²ltimo suplemento de Babelia, sobre el libro Felipe II. El rey en el despacho, de Jos¨¦ Antonio Escudero-, se sinti¨® repentinamente indispuesto cuando se dirig¨ªa a un hospital para someterse a un an¨¢lisis de sangre previo a una intervenci¨®n quir¨²rgica por una hernia. Ingres¨® en el servicio de urgencias del hospital, donde los m¨¦dicos le diagnosticaron el derrame cerebral a consecuencia del cual falleci¨® unas horas m¨¢s tarde. El historiador, nacido en Sevilla en 1909, ser¨¢ enterrado esta tarde a las cuatro y media en Granada.

Aunque sevillano de origen, Dom¨ªnguez Ortiz resid¨ªa desde hace a?os en Granada, ciudad en la que ejerci¨® como catedr¨¢tico de ense?anza media entre los a?os 1940 y 1967 y donde escribi¨® parte de su amplia obra. Adem¨¢s de abordar asuntos relativos a la historia general de Espa?a, en especial sobre los siglos XVI, XVII y XVIII, Dom¨ªnguez Ortiz aport¨® tambi¨¦n sus conocimientos sobre la historia de Andaluc¨ªa. Sus libros sobre los moriscos adquirieron una importancia capital y a comienzos de los ochenta, en pleno renacer de la conciencia hist¨®rica andaluza, coordin¨® una historia de Andaluc¨ªa en ocho vol¨²menes.

El director de la Real Academia de la Historia, Gonzalo Anes, amigo del fallecido desde hace 50 a?os, declar¨® ayer a Efe que Dom¨ªnguez Ortiz trat¨® en su ingente obra asuntos esenciales de la Historia de Espa?a y "contribuy¨® de forma completa al conocimiento del pasado". Anes cont¨® que hace unos d¨ªas recibi¨® una carta suya "con buen pulso y con la lucidez de siempre", habl¨¢ndole de sus problemas de salud. El primer art¨ªculo de Dom¨ªnguez Ortiz, record¨® Anes, es de 1941, y luego ha publicado cerca de 400, adem¨¢s de numerosos libros. "Toc¨® asuntos esenciales de la Historia de Espa?a de los siglos XVI, XVII y XVIII". Su estilo fue siempre "claro y sencillo. Era muy buen escritor y cualquier lector pod¨ªa entender sus obras", a?adi¨® el director de la Real Academia de la Historia. Anes record¨® tambi¨¦n con emoci¨®n el homenaje que le rindi¨® el pasado mes de octubre la instituci¨®n, con motivo de la presentaci¨®n de una edici¨®n especial de la gran obra de Dom¨ªnguez Ortiz Espa?a: Tres milenios de Historia, en un acto que estuvo presidido por el presidente del Gobierno, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar. Esta obra "resume mis lecturas y mis meditaciones sobre el ser de Espa?a", manifest¨® entonces Dom¨ªnguez Ortiz. Para el historiador, la idea que presidi¨® el libro fue la de una Espa?a cuya personalidad deriva de la herencia de Roma y de la convivencia de sus pueblos en un espacio geogr¨¢fico bien definido. "?Existe una historia de Espa?a o Espa?a es una ficci¨®n, un cuento?", se pregunt¨® Dom¨ªnguez Ortiz. Para el historiador, "su caso es an¨¢logo al de Francia, Italia y Alemania, cuyas piezas tambi¨¦n se han descompuesto y recompuesto a lo largo de siglos y milenios sin perjuicio de su unidad fundamental. Para interpretar correctamente este fen¨®meno hay que desligarse de la tradici¨®n rom¨¢ntico-liberal de la identificaci¨®n de naci¨®n y Estado. Espa?a es mucho m¨¢s antigua que el Estado espa?ol".

El historiador Carlos Seco Serrano lo calific¨® ayer como "uno de los indiscutibles grandes" de la historiograf¨ªa espa?ola y dijo que algunas de sus obras se han convertido en hitos que conforman "una herencia extraordinaria".

Era "un sabio eminente", declar¨® el historiador Javier Tusell, para quien era un estudioso "muy erudito" de la sociedad espa?ola de los siglos XVII y XVIII, con una autoridad indiscutible en la materia.