41 premios Nobel de EE UU, contra un ataque unilateral a Irak
El general Schwarzkopf critica a Rumsfeld por "disfrutar con la guerra"
La posibilidad de que George W. Bush ordene una invasi¨®n de Irak sin contar con el respaldo de la ONU suscita un malestar creciente en Estados Unidos. Las cr¨ªticas a Bush proceden de sectores muy variados. Un total de 41 cient¨ªficos estadounidenses galardonados con el Premio Nobel publicaron ayer un manifiesto en el que expresaban su rechazo a "una guerra preventiva contra Irak desprovista de un amplio apoyo internacional".
El general retirado Norman Schwarzkopf, que dirig¨ªa la coalici¨®n vencedora en la guerra del Golfo de 1991, declar¨® por su parte que los inspectores necesitaban m¨¢s tiempo y critic¨® la belicosidad de Bush y de su secretario de Defensa, Donald Rumsfeld. Y el senador dem¨®crata Joseph Biden acus¨® al presidente de fomentar, con su arrogancia y su err¨¢tica pol¨ªtica exterior, "la mayor oleada de antiamericanismo de los ¨²ltimos 30 a?os".
Entre los premios Nobel que firmaron el manifiesto figuraban Hans Bethe y Norman Ramsey, dos de los f¨ªsicos que trabajaron en el Proyecto Manhattan, el programa ultrasecreto que en 1945 permiti¨® desarrollar la primera bomba at¨®mica. Tambi¨¦n aportaron su firma el qu¨ªmico Walter Kohn, que fue asesor cient¨ªfico del Pent¨¢gono, y Charles Townes, ex director de investigaci¨®n del Instituto de An¨¢lisis para la Defensa y uno de los m¨¢ximos especialistas en ojivas nucleares.
La declaraci¨®n fue suscrita igualmente por economistas como Franco Modigliani y Lawrence Klein, y m¨¦dicos como Louis Ignarro y Harold Varmus. La lista de los 41 premiados con el Nobel inclu¨ªa a 18 receptores de la Medalla Nacional de la Ciencia, el m¨¢ximo honor que Estados Unidos puede conceder a un cient¨ªfico, y seg¨²n Walter Kohn, coordinador de la iniciativa, abarcaba a "votantes republicanos y votantes dem¨®cratas".
"Los abajo firmantes", dec¨ªa el texto del manifiesto, "se oponen a una guerra preventiva contra Irak desprovista de un amplio apoyo internacional. Las operaciones militares contra Irak pueden ciertamente conducir a una victoria contundente en poco tiempo".
"Pero la guerra", segu¨ªa, "se caracteriza por la sorpresa, la p¨¦rdida de vidas humanas y los resultados imprevistos. Incluso con una victoria creemos que las consecuencias m¨¦dicas, econ¨®micas, ambientales, morales, espirituales, pol¨ªticas y legales de un ataque preventivo podr¨ªan erosionar, en lugar de proteger, la seguridad y la influencia de Estados Unidos en el mundo".
Otra voz influyente que se hizo o¨ªr ayer fue la de Norman Schwarzkopf, el general vencedor de la guerra del Golfo. En declaraciones a The Washington Post, Schwarzkopf, que adem¨¢s de h¨¦roe nacional es amigo del ex presidente George Bush, declar¨® que en su opini¨®n "Estados Unidos deber¨ªa esperar y ver qu¨¦ consiguen los inspectores", y lament¨® la falta de "un poco de prudencia" en la estrategia de George W. Bush. El general retirado no ocult¨® su antipat¨ªa por el secretario de Defensa, Donald Rumsfeld: "Francamente, algunas de las cosas que dice Rumsfeld me ponen muy nervioso". "Cuando habla, el secretario de Defensa parece despreciar al Ej¨¦rcito", a?adi¨® Schwarzkopf, "y parece disfrutar con la idea de entrar en guerra".
El caso de Corea del Norte
El senador dem¨®crata Joseph Biden subi¨® por su parte al estrado de la C¨¢mara alta para lanzar un dur¨ªsimo ataque contra la pol¨ªtica exterior de Bush "por su doble lenguaje, que hace que nuestros aliados se pregunten por qu¨¦ negociamos con Corea del Norte, que tiene armas nucleares, y queremos invadir Irak, que no las tiene", "por una doctrina de ataques preventivos que India o Pakist¨¢n podr¨ªan acabar invocando para atacarse mutuamente", "por no permanecer lo bastante en Afganist¨¢n, lo que hace sospechar que tambi¨¦n abandonaremos Irak a su suerte tras derrocar a Sadam Husein", y finalmente por provocar, con su lenguaje arrogante, "la mayor oleada mundial de antiamericanismo de los ¨²ltimos 30 a?os".
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