Camino de la leyenda

Stockhausen contin¨²a en la brecha levantando, pasito a pasito, con una tenacidad admirable, el edificio musical m¨¢s ambicioso desde El anillo del Nibelungo, de Wagner: la ¨®pera Licht (Luz), en siete jornadas que responden a cada uno de los d¨ªas de la semana. Los datos son apabullantes: 26 a?os de trabajo desde el pistoletazo de salida; 27 horas de m¨²sica compuesta ya; cinco d¨ªas completos estrenados y varias escenas sueltas. El Festival de Canarias ha puesto en pie anteayer Hoch-Zeiten (Bodas o Buenos tiempos, seg¨²n se traduzca), escena quinta de Sonntag (Domingo), una composici¨®n para coro y orquesta que se interpreta simult¨¢neamente en dos salas.

La obra dura aproximadamente 33 minutos y se interpreta dos veces en cada una de las salas, una con la presencia de la orquesta y otra con la del coro. El espectador puede elegir el orden. Orquesta y Coro de la WDR est¨¢n divididos en cinco secciones m¨¢s o menos circulares, cada una con su m¨²sico gu¨ªa. Durante la actuaci¨®n, a trav¨¦s de un sistema de altavoces, a veces la orquesta se integra en el coro y el coro en la orquesta. Esta combinaci¨®n de m¨²sicas visibles e invisibles produce sensaciones muy diferentes seg¨²n sean los instrumentistas o los cantantes los que est¨¢n a la vista del p¨²blico.

Cada grupo del coro canta poemas de amor en cinco idiomas y con cinco ritmos diferentes. Generalmente el grupo de las sopranos 1, con distintivo azul celeste en el vestuario, lo hace en hindi-s¨¢nscrito; el de las sopranos 2, con un toque verde, en chino; el de las contraltos, en ¨¢rabe; el de los tenores, de naranja, en ingl¨¦s, y el de los bajos, en africano (suahili). Los textos proceden de diferentes fuentes tradicionales y la mayor¨ªa se encuentran transcritos fon¨¦ticamente. En la actuaci¨®n coral aparece en vivo unos momentos un trompetista. Las dos salas est¨¢n meticulosamente sincronizadas a trav¨¦s de par¨¢metros de sonido controlados por el compositor.

Una obra directa

Stockhausen, pues, en estado puro, en sus investigaciones espaciales, aunque en esta ocasi¨®n tocando tierra, es decir, despertando emociones, especialmente cuando la m¨²sica visible viene del sensacional coro de la Radio WDR. No estamos ante una apuesta c¨®smica "imposible" como en el cuarteto de los helic¨®pteros incluido en la tercera escena de Mittwoch (Mi¨¦rcoles), sino ante algo mucho m¨¢s palpable, directo, intuitivo. Hoch-Zeiten es una obra espl¨¦ndida en s¨ª misma, al margen de su integraci¨®n en la ¨®pera Licht.

Dec¨ªa Steiner que, si algo es exigible a los festivales, es la apuesta por la excepcionalidad, por el riesgo, por la novedad. En esa perspectiva, el de Canarias se ha apuntado un tanto excepcional. Y su p¨²blico respondi¨® con respeto y admiraci¨®n.