La rep¨²blica de Aznar

"Se?or presidente de la Rep¨²blica", llam¨® Bush junior a Aznar. Me estremec¨ª: pensar que si llegase una rep¨²blica la presidir¨ªa Aznar amarga la vida; mi compadre Eduardo Sotillos lo advierte en un art¨ªculo y lo lamenta por m¨ª. Si los Bush creen que Sadam tiene armas cuando no tiene nada, le hacen una guerra; si creen que Aznar es presidente de la Rep¨²blica, le ponen. No s¨¦ si lo es ya. El Rey parece con poco inter¨¦s en ser rey; almorz¨® con la Mesa del Congreso y pregunt¨® a Alcaraz (PCE) qu¨¦ significa la etiqueta de "No a la guerra" en su solapa. Nadie me dice m¨¢s de la conversaci¨®n. No s¨¦ si la familia real puede llevar pegatinas o insignias: supongo que s¨ª, porque les est¨¢ permitido hablar, aunque con obligaci¨®n de ser muy sosos. Y la etiqueta, pegatina o insignia pertenece al lenguaje. En todo caso, "No a la guerra" no ofende a nadie, y he escuchado a Federico Trillo encomiar la manifestaci¨®n y asegurar que ¨¦l y su Gobierno quieren la paz. Al Ministerio de Defensa, que fue de la Guerra y luego del Ej¨¦rcito, le falta un paso en su transformaci¨®n sem¨¢ntica, que es el de llamarse de la Paz. Buen cargo para Trillo despu¨¦s de una manifestaci¨®n que ilumine su cerebro togado. Una feliz frase muy pol¨ªtica: "Si no puedes vencerlos, s¨²mate a ellos".

Esta Administraci¨®n pulula de sumandos. Tener a don Jos¨¦ Mar¨ªa presidiendo una rep¨²blica y a don Juan Carlos de jefe de Gobierno ser¨ªa una transformaci¨®n interesante, pero me temo que el orden de factores no alterar¨ªa el producto: mandar¨ªa ¨¦l. Est¨¢ en su naturaleza, como en el cuento del escorpi¨®n y la rana que contaba Rostand ("?Me pasas el r¨ªo, ranita?". "No, que me picar¨¢s". "Tonta, si te picase me ahogar¨ªa yo". Sube, pasan, y en la corriente el escorpi¨®n pica y se hunden: "?Qu¨¦ has hecho!", dice la ag¨®nica rana; "Lo siento; est¨¢ en mi naturaleza"). El hecho es que la Constituci¨®n permite semejante cosa, aunque no s¨¦ c¨®mo lo interpretar¨ªa su presidente, el locuaz y extra?o Jim¨¦nez de Parga (no saben qu¨¦ hacer sus magistrados con la demanda de destituci¨®n que hacen los vascos: siendo vascos, no la atender¨¢n). La cohabitaci¨®n no existe en la Espa?a pol¨ªtica, y en la francesa se ha reducido porque jefe de Estado y de Gobierno son del mismo partido: uno sobre otro pasan el r¨ªo juntos. (Junior, academia: m¨¢s joven que otro con el mismo nombre. J¨²nior, con acento: religioso joven que, despu¨¦s de haber profesado, sigue sujeto a la ense?anza y obediencia del maestro de novicios. ?Qu¨¦ idioma!).